El Gobierno ha comenzado a alojar en inmuebles propiedad del Estado a los menores inmigrantes que llegan en masa a Canarias y al resto de las costas españolas. El Ejecutivo de Pedro Sánchez ha comenzado, en pleno parón de agosto, el reparto de ‘menas’ por toda España, saltándose el veto de las autonomías gobernadas por el PP.
Entre los espacios que el Gobierno central ha empezado a utilizar, Confidencial Digital ha podido saber que se encuentran bases militares, acuartelamientos y otras instalaciones del ejército que el Ministerio de Defensa tiene repartidos por todo el territorio nacional. También se han habilitado balnearios y terrenos de paradores nacionales.
Hasta ahora las autonomías del PP estaban dispuestas a aceptar el reparto de alrededor de 400 niños y niñas, y así lo trasladaron a las autoridades del Estado durante la reunión de consejeros que se celebró a finales de julio en Tenerife.
No obstante, según manifestaron también en ese encuentro con los ministros Ángel Víctor Torres y Sira Rego, reclamaron más soporte por parte del Gobierno de cara a futuros traslados.
Canarias, un territorio gobernado por el PP con Coalición Canaria, y que ha superado todos los límites de sus sistemas de acogida, prevé la llegada de más de 7.000 menores antes de final de año, que en su mayoría tendrán que ser distribuidos por la Península. En la actualidad tienen acogidos a más de 6.000.
En Moncloa consideran que Génova ha torpedeado las posibilidades de acuerdo y no oculta las razones de su “volantazo”: el temor a que Vox y ‘Se Acabó La Fiesta’, el partido de Alvise Pérez, capitalicen políticamente un repunte de llegadas de extranjeros en los próximos meses.
Entre este martes y el jueves Sánchez visitará Mauritania, Senegal y Gambia, principales países de origen de los inmigrantes ilegales que llegan a España por ruta marítima.
Tras la falta de acuerdo en la conferencia sectorial de julio, para abordar una reforma legal que haga obligatorio el reparto de los menores (según lo pactado por los ejecutivos central y canario), Moncloa está reubicando a cientos de extranjeros menores de edad en situación irregular en distintos cuarteles, balnearios, paradores nacionales… de la Península y saltarse así el veto del PP.
El plan lo impulsa el Ministerio de Presidencia. En el marco del mismo, Moncloa ha tratado de que los presidentes de las comunidades y ciudades autónomas faciliten al Ejecutivo un listado con los espacios en sus regiones que podrían ceder para ubicar estos alojamientos donde acoger a los ‘menas’.
Eso incluye palacios de congresos (como es IFEMA, en Madrid), polideportivos (la pista de atletismo de Sabadell donde el Ejército ayudó a instalar un hospital de campaña), hoteles, albergues... El listado de lugares disponibles debía ser enviado al Gobierno a mediados de julio.
A diferencia de los adultos, en el caso de los menores de edad, las competencias de su protección y atención corresponden a las autonomías a las que llegan o a las que son trasladados previo acuerdo de reparto en la Conferencia Sectorial de Infancia.
Hay que destacar que han llegado este verano a la costa de Levante una treintena de pateras, muchas con mujeres, bebés y niños en sillas de ruedas, a los que se atiende con recursos propios, que están ya al 150%.
Fuentes de varias comunidades consultadas por Confidencial Digital denuncian que el Gobierno les ha ‘colado’ en los últimos meses alrededor de 2.000 menores entre los cupos de mayores de edad, que están atendiendo con sus presupuestos “por la falta de compromiso, de responsabilidad y de respuesta” del Ejecutivo central.
En Canarias, donde hay en la actualidad 5.200 menores no acompañados, fuentes del entorno del presidente Fernando Clavijo explican que estos días se están produciendo traslados de niños a la Península.
En algunas comunidades autónomas señalan que apenas tienen información de cuántos extranjeros son alojados en recursos estatales ubicados en sus propios territorios.
Ante la falta de colaboración por parte de la mayoría de autonomías gestionadas por el PP, Presidencia solicitó hace más de un mes a los delegados del Gobierno un listado de inmuebles propiedad del Estado, en los que, por tanto, tenga libertad para aplicar el reparto de menores inmigrantes por toda la Península.
La búsqueda de lugares afecta, por ejemplo, a las Fuerzas Armadas. Fuentes del Ejecutivo consultadas por ECD indican que, por encargo del Ministerio de Defensa, las delegaciones y subdelegaciones del Gobierno en las comunidades y provincias de toda España han recabado datos de las “capacidades militares” que se pueden poner a disposición de este plan.
Hay que recordar que el Gobierno ya solicitó durante la pandemia una lista de cuarteles donde confinar a asintomáticos de coronavirus.
El Ministerio de Sanidad planeaba utilizar instalaciones militares por toda España junto a otras infraestructuras que ofrecieran las comunidades autónomas. Pero la resistencia de las autoridades militares no permitió desplegar el plan. Argumentaron que quedarían al descubierto las deficiencias en los cuarteles, y había miedo también a que se extendiesen los contagios entre los militares.
Por el momento, el Ministerio de Defensa ha cedido ocho cuarteles o emplazamientos militares en Islas Canarias y otros seis en otras zonas de la Península para acoger a inmigrantes en situación irregular.
Hay que señalar que el Ejército del Aire, la Armada y especialmente el Ejército de Tierra cuentan con una red de infraestructuras por toda la geografía nacional: cuarteles terrestres, bases aéreas y navales, academias...
Los delegados y subdelegados del Gobierno han recibido estos días órdenes de sondear la posibilidad de utilizar algunos de estos lugares, incluidos alojamientos temporales, para acoger ‘menas’.
Se han incluido las bases militares entre las opciones a valorar por el Gobierno, igual que esos otros lugares señalados, balnearios, paradores, palacios de congresos, polideportivos, albergues….
Consultados por ECD, desde el Palacio de la Moncloa explican que el asunto de las ubicaciones donde se instalarán los alojamientos para acoger a menores inmigrantes todavía se está cerrando, por lo que no se puede concretar qué lugares resultarán elegidos.
Un caso reciente sirve para ejemplificar las capacidades que podrían aportar las Fuerzas Armadas.
Desde que el proceso independentista en Cataluña alcanzó efervescencia, el cuartel de El Bruc, situado junto a la avenida Diagonal, de Barcelona, ha ido acogiendo a agentes antidisturbios de la Policía Nacional y de la Guardia Civil, enviados desde otros puntos de España para reforzar la presencia en Cataluña.
El cuartel de El Bruc es la sede del Regimiento de Infantería ‘Barcelona’ 63, pero sus efectivos y su material no ocupan todo el espacio del acuartelamiento, de forma que, en caso de necesidad, puede acoger a decenas de agentes de las Fuerzas de Seguridad en una zona que normalmente está cerrada.
De hecho, tal y como se contó en estas páginas el verano de 2019, hubo quejas de policías nacionales allí destinados debido a los problemas con el agua en la parte del acuartelamiento donde se alojaron, por lo que se instalaron unos módulos con duchas al otro lado del patio.
También en el cuartel de la Guardia Civil en Sant Andreu de la Barca existe una zona vacía, en la que estuvieron durmiendo en sacos de dormir miembros del Grupo de Acción Rápida (GAR, una unidad de élite) desplazados a Cataluña en el marco de estos mismos dispositivos de refuerzo.
Fuentes militares con conocimiento del despliegue territorial de las Fuerzas Armadas señalan que, ante esa petición de información por parte de las delegaciones y subdelegaciones del Gobierno, han surgido ciertas reticencias.
Los mandos de las bases han elevado a sus superiores las consultas que les han llegado del delegado o subdelegado en su provincia, preguntando qué respuesta dar, y, en concreto, si deben o no ofrecer espacios de sus acuartelamientos.
Los delegados y subdelegados han puesto como límite este lunes, día 8, para recibir de los responsables de los acuartelamientos de sus provincias el listado con los espacios que podrían ceder para que se habiliten en ellos alojamientos donde acoger a ‘menas’.
Sin embargo, al menos hasta estas últimas horas no estaban recibiendo demasiada colaboración, ya que algunos responsables de las infraestructuras militares no ven claro que los cuarteles y bases sean los sitios adecuados para este fin.
El Gobierno de Canarias, que gestiona en estos momentos ochenta centros en los que están acogidos más de 6.000 menores de edad, ha reclamado la cesión de espacios para la acogida de los menas que llegan al archipiélago.
De cara a los próximos meses se espera la llegada a las islas de unos 70.000 migrantes, de los que se prevé que 7.000, un 10%, sean menores. Se calcula que a final de año podrían alcanzar la cifra de entre 12.000 y 16.000 menas.
Hasta el punto de que en islas, como Lanzarote, se han tenido que instalar carpas en los últimos días para la acogida de los menores que siguen llegando y no tienen plaza en los equipamientos disponibles. Hay que recordar que Pedro Sánchez ha pasado este mes más de dos semanas de vacaciones en Lanzarote, en la residencia oficial de La Mareta.