En las labores cotidianas de la cocina, se encuentran ciertos implementos que se han vuelto completamente imprescindibles para la preparación de los alimentos. No obstante, no todo lo que se emplea en la cocina es seguro. Existe un utensilio en particular, un sartén, que de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), contiene perfluorooctanuico (PFOA), lo cual podría representar un riesgo para la salud. Es fundamental estar atentos a los utensilios que utilizamos en la cocina, ya que ciertos materiales pueden desprender sustancias nocivas al ser sometidos al calor, lo que supone una amenaza para nuestra salud.
Por consiguiente, la OMS hace hincapié en la relevancia de seleccionar utensilios seguros para cocinar y evitar aquellos que puedan contaminar los alimentos con sustancias perjudiciales. Revisa qué es el perfluorooctanuico y cómo podría afectar a tu salud.
El PFOA es un tipo de compuesto químico perteneciente a la familia de los perfluoroalquilos, conocidos como "químicos eternos" debido a su persistencia en el medio ambiente y en el cuerpo humano, precisamente encuentra mayor riesgo cuando esta composición es inhalada. Este compuesto no solo se asocia con un mayor riesgo de cáncer, sino que también ha sido vinculado a una serie de problemas de salud, incluyendo:
El PFOA se encuentra en utensilios como sartenes y ollas denominadas antiadherentes. Por lo que, se recomienda tener cuidado cuando se compran estos productos. Optar por productos hechos de acero inoxidable, hierro fundido o cerámica libre de PFOA.
Durante muchos años, la madera ha sido muy popular en la cocina, especialmente en la cocina tradicional, debido a su facilidad y practicidad. Una de las ventajas de los utensilios de cocina de madera es que no rayan las ollas, son fáciles de agarrar, tienen una mayor durabilidad y muchos de ellos no conducen el calor. La elección de utensilios de cocina de madera puede aportar un toque tradicional y cálido al ambiente, además de ser una opción segura para el cuidado de tus utensilios de cocina.
