Los siempre naifs concursos de misses rompieron su molde casposo en el certamen de Miss Sarajevo de 1993. Un grupo de mujeres en bañador, candidatas a la corona de la más bella de la capital bosnia, lanzó un grito al mundo que ignoraba su sufrimiento con una pancarta “Don't let them kill us” (No dejéis que nos maten). La ciudad llevaba más de un año asediada por las tropas serbias después de que Bosnia y Herzegovina declarara la independencia de Yugoslavia. Una nueva petición de auxilio se alzaba en una ciudad convertida en una ratonera de coches repletos de balazos y barricad ...