La inauguración de Les Corts (1922), el fervor por los ídolos (
Samitier, Zamora, Alcántara, Piera, Sancho), la figura dañada de
Platko artífice de la sufrida Copa (1928) y la conquista de la primera Liga (1929) fueron cotas que llevaron al FC Barcelona a alcanzar su primera Edad de Oro. La gente se divertía en el Paralelo, vibraba con las peleas de
Josep Gironès y era capaz de sobrevivir a las apreturas económicas. El impacto del club coincidió con otra ‘Edad de Oro’ no menos importante, la del tranvía que, catapultado por la Exposición Internacional (1929-30), se convirtió en el transporte de masas de los barceloneses y ayudó al club en su crecimiento.
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