El pedido de sobreseimiento que hará la defensa de los rugbiers franceses imputados por violación en Argentina se postergará al menos hasta la próxima semana, tras la suspensión de la audiencia prevista para este viernes por problemas de salud de la denunciante, según indicó la querella.
"La audiencia se ha suspendido hasta el martes próximo a la misma hora por motivos de salud de mi representada", dijo el abogado querellante Mauricio Cardello a la prensa, incluida la AFP, en la puerta del polo judicial de la provincia de Mendoza (oeste).
"Este tipo de cuestiones le generan nervios, ansiedad. Ella ya tiene un cuadro gástrico anterior a este tema y (...) no estaba en condiciones de venir, pero lo estará el martes", declaró Cardello.
Los abogados de los rugbiers tenían planeado presentar este viernes una solicitud de sobreseimiento y el permiso para que los imputados, Hugo Auradou y Oscar Jegou, de 21 años, pudieran regresar a Francia.
El abogado defensor Rafael Cúneo Libarona consideró que la suspensión de la audiencia, en la que se iban a conocer los resultados de la pericia psiquiátrica hecha a la denunciante, es una "táctica dilatoria" y dijo que espera que el martes finalmente se presente la querellante.
"Un día amargo para la justicia, un día triste para mí, porque soy el primer responsable que quiero que los jugadores se vayan lo antes posible a Francia, porque así lo merecen. Los jugadores están muy fuertes de ánimo, pero con expectativas de volver", añadió.
Auradou y Jegou se encuentran en libertad en Mendoza, pero siguen imputados por violación agravada por un encuentro ocurrido en la noche del 6 al 7 de julio con una mujer argentina de 39 años en una habitación de hotel en Mendoza, a 1.000 kilómetros de Buenos Aires, donde la selección francesa de rugby acababa de disputar un partido contra el seleccionado local.
La denunciante, que conoció a los jugadores en un club nocturno y se fue con uno de ellos hasta un hotel, dijo que sufrió violación y violencia por parte de los dos en su habitación. Los acusados admiten haber tenido relaciones sexuales con la querellante, pero afirman que fueron consentidas y niegan haber ejercido violencia.
La semana pasada la fiscalía informó que no existían elementos para solicitar la prisión preventiva de los imputados por no haber haber pruebas suficientes y "por acreditarse francas contradicciones internas y periféricas" en el relato de la denunciante.