Campeón del mundo y dos veces de Europa con España, el juego y los movimientos de Cesc Fábregas (Arenys de Mar, Barcelona, 1987) fueron moldeados por tres de los más grandes entrenadores del planeta fútbol. En el Arsenal trabajó con Arsene Wenger , en el Chelsea estuvo a las órdenes de José Mourinho y en el Barcelona aprendió al dictado del libro de Pep Guardiola . Con esos antecedentes no extraña que al catalán le picara el gusanillo y eligiera el camino del banquillo tras colgar las botas, en julio de 2023. Después de los años dorados en los que militó en algunos de los mejores clubes del continente y conquistó un ramillete de títulos (hasta 17, con la única laguna de la Champions), el difícil momento de la despedida llegó en el Como 1907, un modesto al que se había unido en 2022 cuando militaba en la Serie B italiana. Firmó por dos temporadas, pero el castigo de las lesiones le obligó a bajarse del barco al término de la primera. Un paso que dio solo a medias porque apenas unos meses después (noviembre de 2023) se convirtió en el entrenador de un equipo al que a final de la pasada temporada devolvió, tras dos décadas de ausencia, a la Serie A. Cesc se estrena en la élite del fútbol italiano en este curso 2024-25 con el objetivo de la permanencia (debutó el pasado fin de semana con derrota ante la Juventus) y ha decidido rodearse de futbolistas españoles para lograrlo. Reclutados para la causa desde hace semanas el guardameta Pepe Reina y el defensa Alberto Moreno (la pasada campaña ambos en el Villarreal), el Como 1907 también tiene cerrada la incorporación, aunque aún no la ha oficializado, de Nico Paz , uno de los canteranos con más proyección del Real Madrid. Un talentoso centrocampista que la pasada campaña sumó ocho apariciones con el primer equipo blanco, tres de ellas en la Champions League, llegando a celebrar un gol ante el Nápoles. No son, sin embargo, los únicos españoles que compartirán vestuario con Cesc porque el exjugador azulgrana ha sido fundamental para que Sergi Roberto , al que el Barça despedía hace solo unos días por la puerta de atrás, haya aceptado la oferta del Como 1907 para unirse a su proyecto a orillas del famoso lago de la región de Lombardía. Cuatro compatriotas, de momento, en ayuda de un técnico que la pasada temporada consiguió el ascenso de 'tapadillo' porque carecía de la licencia UEFA Pro, necesaria para entrenar en la élite, y solo pudo ejercer como primer entrenador durante un mes. A partir de ahí y debido a la reglamentación, se vio obligado a ceder el puesto a su segundo, el galés Osian Roberts. Este curso es todo diferente porque Cesc Fábregas consiguió el pasado mes de julio la licencia para poder ser entrenador del Como 1907 con todas las de la ley. Un equipo al que la presencia del excentrocampista en su banquillo también le ha ayudado a fichar a otro viejo conocido de la Liga española, el defensa francés Raphael Varane (Real Madrid). La vinculación de Cesc Fábregas con su club no es, sin embargo, únicamente deportiva. El ex internacional español y otros dos famosos exjugadores, el francés Thierry Henry y el inglés Dennis Wise , son accionistas minoritarios de un equipo que quebró en 2016 al no poder pagar sueldos, deudas ni impuestos. Una entidad que fue adquirida en 2019 por los hermanos Robert Budi y Michael Bambang Hartono, dos millonarios indonesios que figuran en el top 100 de la lista de Forbes de las mayores fortunas del mundo. Llegaron cuando el equipo jugaba en la Serie D (cuarta categoría italiana) con el objetivo de ascender lo más rápido posible a la élite. Una meta que consiguió Cesc en su primer año en el banquillo. Junto a Pepe Reina, Alberto Moreno, Nico Paz y Sergi Roberto , el técnico afronta esta campaña con el reto de la permanencia. La derrota en el estreno ante la Juve no mermó la ilusión del entrenador español. «Humildad, tranquilidad, somos el Como. Quien piense que hemos venido para jugar la Champions se equivoca. Esto es un proceso largo, sabemos lo que tenemos que hacer internamente, dónde estamos y cómo lo tenemos que hacer. Poco a poco y a trabajar», afirmó el pasado fin de semana.
