Debido a las regulaciones tributarias en el país, es indispensable que los establecimientos comerciales formales emitan una boleta al concretar una venta o prestar un servicio al consumidor final. Esta práctica permite un mejor control de los ingresos en los registros contables de la empresa y, a la vez, con la emisión de boletas electrónicas, acortar el proceso de declaración tributaria a la Superintendencia Nacional de Aduanas y de Administración Tributaria (Sunat). Con la finalidad de promover la tributación en el país a través de beneficios para los consumidores, como la devolución de impuestos, se ha vuelto común entregar el Documento Nacional de Identidad (DNI) físico tanto en restaurantes como en hoteles; sin embargo, esta práctica puede resultar peligrosa.
Por ello, la Autoridad Nacional de Protección de Datos Personales (ANPD) del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos (MINJUSDH) aconseja encarecidamente no entregar el DNI físico al solicitar una boleta electrónica.
No se debe entregar el DNI físico al solicitar una boleta electrónica, según el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos (MINJUSDH), debido a la protección de los datos personales. El DNI contiene información sensible que, si cae en manos equivocadas, puede ser utilizada de manera indebida, exponiendo a las personas a riesgos como el robo de identidad.
La Autoridad Nacional de Protección de Datos Personales (ANPD) enfatiza la importancia de mantener la seguridad de los datos en un contexto donde la digitalización de servicios está en aumento. Al evitar la entrega del DNI físico, se reduce la posibilidad de que la información sea mal utilizada. Además, al usar boletas electrónicas, se contribuye a un sistema de facturación más transparente y eficiente, que facilita el registro de los gastos para posibles deducciones fiscales en el futuro.
En lugar de entregar el documento físico, es suficiente con proporcionar el número de DNI y el nombre completo. Esta práctica no solo cumple con los requisitos legales para la emisión de la boleta electrónica, sino que también protege la información personal.
Las boletas electrónicas ofrecen múltiples ventajas que benefician tanto a las empresas como a los consumidores. En primer lugar, permiten una emisión rápida y eficiente, eliminando la necesidad de imprimir documentos en papel, lo que ahorra tiempo y recursos. Además, contribuyen a la reducción de costos, ya que se eliminan gastos relacionados con papel, tinta y almacenamiento físico.
Asimismo, los trabajadores en planilla pueden deducir un porcentaje de sus gastos en boletas electrónicas de su Impuesto a la Renta. Para los años 2023 y 2024, el porcentaje deducible es del 15%, con un tope de 3 UIT (aproximadamente S/15.450). Para los años anteriores, este porcentaje fue del 25%.