Michael Vargas Arango, un joven colombiano de 22 años y estudiante de Psicología en Miami, ha logrado un reconocimiento destacado en el NPR Podcast Challenge. Esta competencia, que reunió a más de 500 estudiantes de universidades estadounidenses, premió a Vargas Arango por su valiente relato sobre su experiencia con el trastorno esquizoafectivo.
Su testimonio de ocho minutos, titulado 'The Monsters We Create' ('Los monstruos que creamos'), no solo captó la atención del jurado, sino que también ofreció una perspectiva conmovedora sobre las luchas internas y estigmas asociados a las enfermedades mentales.
Desde temprana edad, Michael ha experimentado lo que él describe como "presencias extrañas" en su vida cotidiana. Estas sensaciones, que a menudo se manifestaban en forma de energías negativas cuando estaba en ciertos lugares o en la compañía de algunas personas, llevaron a quienes lo rodeaban a creer que poseía un 'don' especial.
Sin embargo, lo que para otros parecía un regalo divino, para Michael se convirtió gradualmente en una fuente de angustia. En sus momentos de mayor desesperación, esta percepción distorsionada de la realidad lo llevó a intentar acabar con su propia vida.
El diagnóstico de Michael reveló una doble condición: un trastorno esquizoafectivo y un trastorno de personalidad emocionalmente inestable. El trastorno esquizoafectivo combina síntomas de esquizofrenia, como alucinaciones y delirios, con trastornos del estado de ánimo, como la depresión y la manía. Esta condición se manifiesta a menudo a través de alucinaciones auditivas y una percepción alterada de la realidad, lo que ha llevado a Michael a experimentar una disonancia entre lo que cree hacer y lo que realmente sucede.
Michael explica que, durante los episodios de alta tensión o estrés, las alucinaciones suelen ser auditivas, con voces que a menudo no entiende. "Oigo voces que a veces dicen mi nombre, pero la mayoría del tiempo no puedo entender lo que me dicen", relata Vargas Arango. A pesar de la intensidad de estas experiencias, Michael descubrió que las voces cesaron durante su intento de suicidio, un hecho que contrasta con la creencia común de que estas alucinaciones suelen intensificarse en momentos de crisis.
El cambio en la vida de Michael comenzó cuando su familia se mudó a Envigado, cerca de Medellín. Este cambio le permitió participar en actividades sociales y deportivas que antes le eran inaccesibles. Sin embargo, a pesar de estos avances, Michael continuó enfrentando las sensaciones negativas y las alucinaciones. Fue en esta etapa que empezó a sentir una creciente separación entre su percepción y la realidad, con episodios en los que experimentaba una especie de disociación.
El punto de inflexión llegó cuando Michael tocó fondo en su salud mental y buscó ayuda profesional. A pesar de haber tenido acompañamiento psicológico previo, el diagnóstico formal del trastorno esquizoafectivo y el trastorno de personalidad le permitió entender mejor su condición y comenzar un tratamiento adecuado. Este proceso de autoentendimiento y aprendizaje sobre la enfermedad le ofreció una nueva perspectiva sobre su vida y su historia familiar.
La experiencia de Michael ha sido una inspiración para muchos por su valentía en compartir su historia y su determinación para desafiar los estigmas asociados con los trastornos mentales. A través de su podcast premiado, Michael expone los prejuicios que existen sobre la esquizofrenia y otros trastornos mentales en la comunidad universitaria. Su objetivo es mostrar que, a pesar de las dificultades, las personas con estas condiciones tienen la capacidad de lograr grandes cosas y no deben ser juzgadas únicamente por su diagnóstico.
Michael Vargas Arango continúa su vida en Miami, donde estudia y mantiene una relación de apoyo con su pareja. Su historia es un testimonio de cómo, a pesar de los desafíos significativos, es posible encontrar la fuerza para superar las adversidades y contribuir positivamente a la sociedad. El mensaje que Michael desea transmitir es claro: todos enfrentamos problemas y desafíos, pero eso no define nuestra capacidad para tener éxito y hacer una diferencia en el mundo.