La defensa de David Sánchez, hermano del presidente del Gobierno, quiere apartar a una de las asociaciones de la acusación popular bajo la que ya están personadas en la causa en la que se investiga su trabajo en la Diputación de Badajoz y situación tributaria.
En un recurso de reforma dirigido al Juzgado de Instrucción número 3 de Badajoz argumentan que la asociación Liberum "carece de legitimidad" para ejercer la acusación porque los objetivos que tiene como entidad civil –"restaurar derechos y libertades que han sido usurpados en la Covid"– carecen de relación con los delitos de malversación, prevaricación, tráfico de influencias y fraude fiscal que se investigan.
En relación a los hechos por los que nació el procedimiento que fueron inicialmente por Manos Limpias: su contratación como director de la Oficina de Artes Escénicas de la institución provincial pacense, puesto de trabajo al que no acudiría, y su residencia fiscal en Elvas (Portugal), además del patrimonio de dos millones de euros que tendría.
El abogado que ejerce la defensa del único hermano de Pedro Sánchez insiste en el escrito en que "nada tienen que ver ni con la pandemia ni con la defensa de los derechos humanos" lo que se analiza en el caso ni diligencias practicas como los dos registros efectuados por la Guardia Civil en las instalaciones de la Diputación de Badajoz.
Dado que, expone en nombre de David "Azagra", se refiere a delitos como la malversación y la prevaricación que afectan a "bienes jurídicos colectivos", en este caso de la Administración, y no a los derechos humanos "que se fundan en la dignidad personal del ser humano".
Bajo esta tesis procesal, el hermano del presidente intenta que la jueza instructora Beatriz Biedma declare improcedente la personaron y la aparte del conocido ya como "caso David Sánchez" por falta de legitimidad para ser parte.