Un vuelo que parecía transcurrir con normalidad se convirtió en un evento digno de recordar cuando una pasajera, visiblemente molesta, decidió expresar su inconformidad por un incidente olfativo que había afectado a todos a bordo. Lo que parecía ser un viaje rutinario se transformó en un escenario de risas y asombro cuando alguien, de manera anónima, expulsó una flatulencia muy olorosa. El video no tardó en volverse en viral en las redes sociales.
Durante el viaje, una pasajera no pudo soportar el desagradable olor que invadió la cabina. Como todos sabemos, los aviones son espacios cerrados donde cualquier aroma puede convertirse en un problema mayor, especialmente cuando no hay posibilidad de abrir una ventana para que ingrese aire. La mujer, sin contener su molestia, se quejó en voz alta, buscando al responsable de lo que llamó un 'crimen' contra el olfato de los demás pasajeros.
La mujer, en su enojo, no solo expresó su queja, sino que también pidió al piloto que interviniera para identificar al culpable. "Aquí somos como 5.000 gente, el que se tiró ese maldito pedo que hable, que estas ventanas son cerradas para estar cag…se", exclamó, palabras que generaron una oleada de risas entre el resto de los pasajeros. Su demanda no pasó desapercibida, y muchos no pudieron contener la risa ante la situación tan peculiar.
El incidente no tardó en viralizarse en redes sociales. Un video que capturó el momento fue compartido en plataformas como TikTok, donde los usuarios rápidamente comenzaron a comentar sobre la situación. Algunos se solidarizaron con la mujer, al destacar lo incómodo que puede ser lidiar con malos olores en un espacio cerrado, mientras que otros simplemente se divirtieron con la forma en que la señora manejó la situación.
A lo largo de los años, las situaciones inusuales en vuelos han dado pie a todo tipo de anécdotas y memes, y esta no fue la excepción. El humor con el que la pasajera expresó su queja ayudó a aliviar la tensión del momento, convirtiendo lo que podría haber sido una experiencia desagradable en una historia divertida para contar. Aunque nadie confesó ser el autor de la flatulencia, el evento sirvió para unir a los pasajeros en una risa compartida.
“El de camisa blanca tiene cara de sospechoso”, “Revísale las orejas, el que las tiene rojas, ese fue”, “Me quiero bajar”, “Muero de risa con esa mujer”, “Yo digo que es la señora que está hablando”, señalaron los usuarios en las redes sociales.
