El 15 de agosto de 2024, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) entregó la constancia como presidenta electa a Claudia Sheinbaum Pardo, marcando un hito histórico en la política mexicana. Este evento no solo confirmó oficialmente la victoria de Sheinbaum en las elecciones presidenciales, sino que también desencadenó una oleada de reacciones en redes sociales y medios de comunicación.
Según un análisis de Metrics, la entrega de la constancia a Claudia Sheinbaum generó un impacto significativo, con un alcance de 7.6 millones de personas, lo que es 3.45 veces mayor que el promedio de alcance de las coyunturas durante su campaña. Esta cifra demuestra el interés y la expectación que este evento ha suscitado en la sociedad mexicana.
La conversación digital fue ampliamente positiva tanto hacia el TEPJF como hacia Claudia Sheinbaum. El análisis revela que el 92 por ciento de las menciones relacionadas con el TEPJF fueron positivas, con un enfoque en la legitimidad del proceso electoral y el respaldo de figuras clave de Morena como Mario Delgado Carrillo y Delfina Gómez Álvarez. Solo un ocho por ciento de las menciones mostraron una actitud negativa, cuestionando la constitución del TEPJF.
Por otro lado, el 95 por ciento de las menciones relacionadas con Claudia Sheinbaum también fueron positivas. Los usuarios destacaron su discurso al recibir la constancia, su llegada arropada por el pueblo al TEPJF y su mensaje previo a la ceremonia. Solo un cinco por ciento de las menciones fueron negativas, con algunos llamando a impugnar la elección y cuestionando la legitimidad de su victoria.
Este evento no sólo consolida a Claudia Sheinbaum como la próxima presidenta de México, la notable diferencia en el alcance y la reacción pública en comparación con otras coyunturas durante su campaña demuestra que la entrega de la constancia es un momento decisivo que resonará en la memoria colectiva de los mexicanos.
Con este acto, México celebra la llegada de su primera mujer presidenta, un logro que resuena en la sociedad y que refleja el progreso en la lucha por la igualdad de oportunidades para todos. Este acontecimiento también inspira a futuras generaciones de mujeres a participar activamente en la vida política del país, demostrando que el techo de cristal se puede romper.
