Jannik Sinner se presentará el lunes 26 en Nueva York para el comienzo del US Open como número uno del mundo, como el único jugador que este curso ha ganado dos Masters 1.000 y como la raqueta con más títulos en 2024 con cinco. El italiano fue superior en la final de Cincinnati a Frances Tiafoe y se impuso al estadounidense por 7-6 (7/4) y 6-2 en 96 minutos para sumar el décimo quinto título de su carrera.
Dio igual que Tiafoe salvara una bola de set antes del desempate con que se resolvió el primer parcial. Sinner no titubeó y el segundo set fue un paseo para el ganador del Abierto de Australia y los torneos de Miami, Rotterdam y Halle.
Cincinnati ha servido para que el número uno del mundo despejara las incógnitas con las que llegaba sobre su estado físico. Después de caer en cuartos de final de Wimbledon ante Medvedev, el italiano renunció a los Juegos Olímpicos por una inflamación en las amígdalas. Su trayectoria en el torneo ha permitido comprobar que está plenamente recuperado de los problemas físicos, ya que ha sido capaz de resolver partidos muy equilibrados desde segunda ronda. Y en cuartos y semifinales solventó dos citas muy complicadas ante Rublev y Zverev.
Sinner llega al US Open con un colchón muy importante en el ranking en relación a Novak Djokovic y Carlos Alcaraz. Al serbio le aventaja en 2.300 puntos y al murciano, en 2.400. Alcaraz ve amenazado su tercer puesto, ya que apenas cuenta con 325 puntos de ventaja sobre Alexander Zverev. En Cincinnati, el subcampeón olímpico cayó en su debut ante el francés Gael Monfils y además de mala manera no tanto por el resultado como por la imagen dada, con el feísimo gesto de romper la raqueta al golpearla hasta cuatro veces contra el suelo. Alcaraz fue semifinalista en año pasado en Nueva York.