El Juzgado de lo Penal número cuatro de Orihuela, con sede en Torrevieja ( Alicante ), ha condenado a ocho meses de prisión a un hombre que agredió a unos agentes de la Guardia Civil que actuaron en un caso de violencia doméstica. El ahora condenado se había atrincherado en una vivienda e impedía el acceso a su madre, que le había denunciado previamente. Los hechos sucedieron en mayo de 2023 cuando una mujer denunció a su hijo por un delito de violencia doméstica y este se atrincheró en el domicilio, cuya puerta atrancó con distinto mobiliario e impidió el acceso a su madre. Varias patrullas de la Guardia Civil fueron comisionadas para detenerle. El ahora condenado recibió a los agentes con insultos y amenazas y se negaba a abrir la puerta, por lo que tuvieron que requerir la presencia de un cerrajero. Cuando los agentes intentaban acceder al interior del domicilio, el hijo, con ánimo de atentar contra la integridad física de los efectivos, agredió a la agente que entró en primer lugar, por lo que tuvo intervenir el resto para inmovilizarlo. El hombre siguió lanzando golpes con el puño que impactaron en otro agente y comenzó un « fuerte forcejeo » hasta que cayeron al suelo, donde fue finalmente reducido y engrilletado, según ha informado la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) en Alicante en un comunicado. Como consecuencia de los hechos, dos de los guardias civiles intervinientes sufrieron lesiones que requirieron para su cura tratamiento médico y farmacológico. Uno de los agentes lesionados solicitó los servicios jurídicos de AUGC , que ha ejercido la acusación particular a través del letrado Alberto Manuel Mollá Díez. El acusado ha sido condenado por un delito de atentado contra los agentes de la autoridad a la pena de ocho meses de prisión y al pago de 1.440 euros por cada uno de los dos delitos de lesiones que se le atribuían así como a indemnizar a los agentes agredidos con la cantidad de 1.080 euros y 1.930 euros. La AUGC ha subrayado la necesidad de reforzar el principio de autoridad y que los agentes sean reconocidos como «profesión de riesgo», al igual que las policías autonómicas. La asociación ha señalado que, según los datos del Sistema Estadístico de Criminalidad del Ministerio del Interior, el año 2023 se cerró con 16.762 agresiones a los miembros de las FFCCSE, un 0,66 por ciento más que en 2022. Asimismo, ha apuntado que, en lo que va de año, Alicante ocupa el cuarto lugar entre las provincias de España con 626 agresiones a policías y guardias civiles, por detrás de Madrid, con 2.191; Barcelona, con 1.177 y Valencia con 752. AUGC ha expresado su satisfacción por que los agentes, en esta ocasión, «no hayan acabado con lesiones más graves o irreversibles a causa de la agresión sufrida y ha reclamado las »modificaciones pertinentes en el Código Penal para que este tipo de delitos tengan un endurecimiento de las penas con el fin de reforzar el principio de autoridad«.
