En el corazón de América Latina, un parque nacional se posiciona como el segundo más grande del mundo y el más amplio del continente, solo superado por el Parque Nacional del Noreste de Groenlandia. Este gigante de la conservación, establecido oficialmente el 27 de noviembre de 2017, abarca una extensión de 14.808.780 hectáreas, o 148.087 kilómetros cuadrados, lo que equivale a casi dos veces el tamaño de países como Costa Rica o Irlanda.
El parque, además de destacar por su vasta superficie, también resalta por su importancia ecológica y geológica. Este territorio protegido representa más del 13% del área total del país que lo alberga y tiene como objetivo preservar la biodiversidad de la región, hogar de más de 1.360 especies de flora y fauna.
El Parque Nacional Revillagigedo es un tesoro natural ubicado en México, reconocido como el parque nacional más grande de América Latina y el segundo en el ranking mundial. Este extenso territorio marítimo se ubica en el océano Pacífico y está compuesto por el archipiélago de Revillagigedo, un conjunto de cuatro islas de origen volcánico: San Benedicto, Clarión, Socorro y Roca Partida.
Con una superficie superior a la de muchos países, el Parque Nacional Revillagigedo supera en tamaño a los parques nacionales de China y Estados Unidos, consolidándose como una de las áreas protegidas más importantes a nivel global. Su lejanía de la costa continental, a más de 700 kilómetros, ha permitido que su biodiversidad florezca con un mínimo impacto humano, lo que lo convierte en un laboratorio natural único en el mundo.
Con más de 1.360 especies identificadas, el parque alberga una variedad de fauna y flora autóctonas, muchas de las cuales son endémicas y están en peligro de extinción. Especies marinas emblemáticas como las tortugas golfinas, las mantarrayas gigantes, los tiburones martillo, y las ballenas jorobadas encuentran refugio en las aguas cristalinas que rodean estas islas.
En tierra, el archipiélago es hogar de especies únicas como la lagartija de árbol de la Isla Socorro y la culebra chirriadora de Isla Clarión, que no se encuentran en ningún otro lugar del planeta. Esta impresionante riqueza ecológica ha convertido al parque en un punto de interés global para científicos y conservacionistas, quienes buscan entender y proteger la compleja red de vida que allí existe.
Visitar el Parque Nacional Revillagigedo es una experiencia reservada para aquellos aventureros que buscan conectar con la naturaleza en su forma más pura. Debido a su ubicación remota y su estatus de protección, el acceso al parque está restringido y regulado por las autoridades ambientales. Las visitas suelen estar limitadas a expediciones científicas y grupos de buceo que tienen permiso para explorar sus aguas ricas en vida marina.
El parque se ha convertido en un destino de buceo de clase mundial, atrayendo a turistas internacionales que buscan sumergirse en uno de los ecosistemas marinos más intactos del planeta. Con sus aguas claras y una visibilidad que supera los 30 metros, los buceadores pueden experimentar encuentros cercanos con especies majestuosas como tiburones, mantarrayas y delfines en un entorno casi prístino.
