El vicejefe del Consejo de Seguridad de Rusia y expresidente, Dmitri Medvedev , ha declarado que las fuerzas rusas deben avanzar hacia Odesa, Járkov, Dnipro, Mykolayiv, Kiev y más allá. La incursión ucraniana en Kursk , donde «hasta mil soldados» participaron en ella, según el jefe del Estado Mayor ruso, Valeri Guerásimov , ha motivado la ira de Moscú. Sin embargo, «el avance del enemigo hacia las profundidades del territorio fue detenido por ataques aéreos y de artillería», afirmó Guerásimov al presidente Vladímir Putin durante una reunión retransmitida por la televisión rusa, según informó AFP. A raíz de los acontecimientos en Kursk, Medvedev apuntó a que Moscú no debería conformarse con los territorios que considera identitariamente suyos, sino que «nos detendremos solo cuando lo consideremos aceptable y beneficioso». Por su parte, el presidente Putin calificó la incursión ucraniana en Kursk de escalar el conflicto: «El régimen de Kiev ha lanzado otra gran provocación» y acusó a Ucrania de llevar a cabo bombardeos indiscriminados contra objetivos civiles en Kursk. El gobernador de la región fronteriza de Kursk, Alexei Smirnov , estableció el estado de emergencia tras la incursión ucraniana, según escribió en Telegram: «Para eliminar las consecuencias de la entrada de fuerzas enemigas en la región, decidí establecer el estado de emergencia en la región de Kursk a partir del 7 de agosto». Además, Moscú afirmó haber neutralizado diversos ataques ucranianos con aviones no tripulados sobre su territorio: «Se detuvieron los intentos del régimen de Kiev de llevar a cabo ataques terroristas con vehículos aéreos no tripulados contra objetivos en el territorio de la Federación de Rusia», comunicó el Ministerio de Defensa en Telegram. «Los sistemas de defensa aérea de servicio interceptaron dos vehículos aéreos no tripulados ucranianos sobre las regiones de Kursk y Oryol», añadió. En medio de esta escalada, la Casa Blanca afirma desconocer las motivaciones y preguntará a Kiev por los objetivos del ataque ucraniano en Kursk. Mientras tanto, la futura presidenta de México, Claudia Sheinbaum, ha invitado a su homologo ruso al acto de toma de posesión el próximo 1 de octubre bajo el pretexto de que México tiene relaciones diplomáticas con Rusia. El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski , ha solicitado a Sheinbaum que arreste a Putin en caso de asistir al evento con una orden de la Corte Penal Internacional.