Nunca el boxeo español ha ganado una medalla de oro en los Juegos Olímpicos. Rafa Lozano, el seleccionador, ganó la de plata en los Juegos de Sydney, los últimos del siglo XX. Ahora Ayoub Ghadfa, boxeador marbellí de 25 años, tiene la oportunidad de dar un paso más y llevar al boxeo español adonde nunca ha llegado.
Y lo hace, además, en un territorio prohibido para el boxeo español, el de los grandes pesos. Ayoub compite en la categoría de más de 92 kilos, escenario para hombres grandes, incapaces de cazar a un boxeador tan ágil para su peso como el español. Es un peleador rápido de pies y de manos, inalcanzable para un rival como el francés Djamili-Dini Abodou. Un peleador con más kilos de los necesarios, con un ritmo lento y una esgrima rudimentaria. Un rival muy inferior al español, al que sólo el apoyo de su público y el desconcierto de los jueces, que no se sabe muy bien lo que han ido valorando a lo largo del campeonato, podían derrotarlo.
Pero las cartulinas de puntuación reconocieron la superioridad de Ayoub Ghadfa desde el comienzo. Cuatro jueces le dieron ganador del primer asalto. En el segundo ya había convencido al quinto. Y para el último, al francés sólo le quedaba la opción del KO. Un golpe definitivo que tumbara al boxeador español.
Se confió Ayoub Ghadfa en su baile y en su dominio del cuadrilátero y de la pelea y en el tercer asalto Aboudou encontró una mano que hizo daño. Un gancho de izquierda –es zurdo el francés– que mandó al suelo al marbellí.
Ayoub se levantó de un brinco para hacer ver que el golpe no le había hecho daño. Es una costumbre suya levantarse así, algo que ya hizo en su primer combate olímpico después de enredarse con las cuerdas. Es también una respuesta a su pasado de niño que sufrió acoso escolar. Un mensaje para aquellos niños que le llamaban gordo y que en su vida ganarán una medalla olímpica.
La caída castigó a Ghadfa en las puntuaciones, pero no tanto como para dejarlo sin final. Su control de la pelea fue absoluto y los jueces lo reconocieron. Incluso dos de ellos le dieron ganador del tercer asalto a pesar de la caída.
El «speaker» anunció por megafonía el triunfo del español por decisión unánime de los jueces. Un triunfo indiscutible que lleva a Ayoub Ghadfa a la final que lo enfrentará el sábado (22:51 h.) al uzbeko Bakhodir Khalolov. La hora esperada por el púgil marbellí para llevar al boxeo español al siguiente nivel.