En agosto de 2022, la tenista Serena Williams anunció que dejaba definitivamente el deporte sorprendiendo a los que la admiran por su enorme legado que dejó en la historia del tenis femenino con sus triunfos. Desde sus inicios, Williams no tuvo nada fácil las cosas debido a la controversia que provocaba su figura y se enfrentó a los malos comentarios demostrando su fuerte carácter. Tras más de veinte años en el punto de mira, Serena lleva una vida alejada de las cámaras y las canchas y centrada en sus hijas. Aún retirada, Serena Williams sigue muy ligada al deporte y, por supuesto, a los Juegos Olímpicos, en los que ella logró obtener cuatro oros. La Ceremonia de Apertura de París 2024 hizo un repaso a la historia de la ciudad, pero también conmemoró a grandes atletas , entre los que se encontraba la tenista. Junto a Rafa Nadal , Carl Lewis y Nadia Comaneci , Williams se encargó de portar la antorcha olímpica montada en la barca. En París, la estadounidense ha estado disfrutando de las competiciones y ha sido testigo de la hazaña de Simone Biles , la atleta más condecorada de la historia de la gimnasia , al ganar el oro, o de la final olímpica entre Alcaraz y Djokovic . Pero entre jornada y jornada, la tenista también tiene tiempo para recorrer la ciudad junto a sus hijas. Ha sido en una de sus últimas salidas cuando ha vivido un tenso momento que ha decidido exponer en sus redes sociales. Un largo paseo por la capital parisina abrió el apetito de la tenista y sus primogénitas. En búsqueda de un restaurante donde saciar su hambre, Serena Williams hizo acto de presencia en el lujoso hotel 'The Peninsula Paris', ubicado en pleno corazón de la ciudad, a tan solo unos pasos de los distritos de compras. Pero al querer degustar de sus platos dentro, Williams no se esperó que le impidiesen entrar. Indignada, ella no podía quedarse callada y tomó una decisión de auténtica 'influencer'. «Me han denegado el acceso para comer en la azotea de un restaurante vacío de sitios más agradables, pero nunca con mis hijos. Siempre hay una primera vez», denunció en su cuenta personal de X, acompañando el texto donde asegura que ya le ha ocurrido en otras ocasiones que no logra entrar a un restaurante, pero sí se estrena en la situación con sus hijas. Sus seguidores enseguida apoyaron a la deportista mostrando también su indignación por lo sucedido y por la decisión del restaurante, para quienes sus trabajadores no actuaron correctamente ante la presencia de una estrella como Serena Williams. Tiempo después, el propio local ha querido calmar la polémica escribiendo un comentario en la publicación de la tenista donde ha explicado el motivo que hay detrás de impedirle la entrada, que está muy lejos de ser una razón personal en contra de la tenista, y le han pedido públicamente disculpas. «Le pedimos disculpas por la decepción que sufrió esta noche. Lamentablemente, nuestro bar en la azotea estaba completamente reservado y las únicas mesas desocupadas que vio pertenecían a nuestro restaurante gourmet, L'Oiseau Blanc, que estaba completamente reservado», se ha justificado el restaurante, para el cual es un «honor» recibir en cualquier momento a Williams. Esta reciente actividad en sus redes sociales no ha sido la única de la tenista. Además de su marcado carácter, también ha mostrado en otra ocasión su buen sentido del humor. Tras aparecer en la barca de la Ceremonia de Apertura y protagonizar un poco desapercibido resbalón a causa de la lluvia de esa tarde, ella escribió un gracioso comentario en X. «Participé en una increíble ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos de París y viajé en bote bajo la lluvia, ¡y llovía a cántaros! Tanto que se me despegaron las pestañas», dijo entonces.
