Uno de los planes más populares del verano es organizar una
barbacoa con amigos, pero debemos ser cuidadosos con lo que ofrecemos. Es
fundamental incluir una proporción adecuada de verduras y alimentos saludables
para evitar que nuestros invitados consuman demasiados alimentos grasos y poco
ligeros, lo cual podría arruinar los esfuerzos de una dieta equilibrada. Aunque
un día especial no debe ser motivo de obsesión con la dieta, es crucial ser
conscientes de lo que comemos para luego poder compensarlo con ejercicio o
alimentos menos calóricos. Para ofrecer una comida equilibrada y nutritiva que
no deje a tus invitados fuera de juego, sigue estos consejos:
Los acompañamientos y aperitivos son esenciales en cualquier barbacoa. Sin embargo, es importante no ofrecer solo alimentos ultraprocesados y con alto contenido de sal, como patatas fritas y cortezas. En su lugar, opta por opciones más saludables. Por ejemplo, puedes hacer un salteado de verduras a la parrilla o preparar un couscous con varias verduras. Además, algunas carnes pueden quedar secas al cocinarse en la barbacoa, y acompañarlas con una salsa puede ser una buena solución. En este caso, las salsas hechas con vegetales picados, el chimichurri o mezclas de especias son opciones más saludables y atractivas que las salsas envasadas. No solo mejoran el sabor, sino que también añaden valor nutricional a la comida.
Las bebidas y los postres son los elementos de una barbacoa que más aumentan el consumo de calorías al final del día. Por ejemplo, una lata de coca-cola tiene 139 calorías y una de cerveza tiene 105 calorías. Aunque debemos ofrecer estas opciones a nuestros invitados, también es importante proporcionar alternativas más ligeras para quienes prefieren consumir menos calorías. Los zumos preparados con frutas frescas y los tés pueden ser una opción muy atractiva. Además, puedes preparar agua infusionada con frutas y hierbas frescas, que no solo es refrescante, sino también baja en calorías.
No todas las carnes son iguales. Las salchichas, longanizas y chorizos son comunes en las barbacoas, pero son muy calóricos y poco nutritivos. Estos productos contienen mucha sal, grasa de mala calidad y sodio, lo que puede causar hinchazón y retención de líquidos. Buen ejemplo de ello son las salchichas, los chorizos y las longanizas, que no son recomendables desde el punto de vista de la salud.
En lugar de comprar estos productos que tienen muchas
calorías, podemos optar por opciones más ligeras, como los pinchos morunos de
pavo, que están hechos de carne magra. Si no queremos dejar de consumir otros
tipos de carne, como la de ternera o cerdo, debemos elegir cortes con menos
grasa, como el lomo, el solomillo o el redondo. Estos cortes no solo son más
saludables, sino que también pueden ser igualmente deliciosos si se preparan y
condimentan adecuadamente.
Las hamburguesas no son malas. Su mala fama viene de estar asociadas con la comida rápida y los productos ultraprocesados. Sin embargo, si se comen con moderación, sus ingredientes no son dañinos. Para hacer hamburguesas más saludables, lo mejor es prepararlas en casa. Esto te permite ser creativo y añadir ingredientes como aguacate o usar salsas saludables como el "pico de gallo" en lugar de kétchup. También es buena idea ofrecer una variedad de condimentos y salsas para que cada persona pueda personalizar su hamburguesa a su gusto, añadiendo un toque personal y saludable a cada bocado.
Cuando pensamos en una barbacoa, generalmente imaginamos una gran variedad de carnes de diferentes tipos, tamaños y colores. Sin embargo, podemos hacer algo un poco diferente. Si añadimos verduras y mariscos a nuestra barbacoa, nuestros invitados estarán agradecidos. Esto les permitirá descansar de tanta carne y consumir alimentos con un mejor valor nutricional. De esta manera, reduciremos la cantidad de grasas saturadas, aumentaremos las proteínas que llenan y reduciremos algunas calorías de manera sencilla. Además, las verduras a la parrilla pueden aportar un sabor delicioso y único que complementa perfectamente el resto de los alimentos.
Lo mismo ocurre con los postres. Normalmente, en una barbacoa se suelen ofrecer helados porque las temperaturas lo demandan. Sin embargo, podemos optar por alternativas más saludables. Una opción es invertir en una heladera para hacer helados caseros usando frutas frescas y lácteos. Estos pueden incluir sabores como piña, coco o cualquier tipo de cítrico, que son refrescantes en verano. Otra alternativa es simplemente servir frutas frescas, ya sea enteras, cortadas o en brochetas. Las frutas no solo son una opción saludable, sino que también son naturalmente dulces y refrescantes, perfectas para un día caluroso.
