«Va a ser una noche larga» , asegura un guardia civil. En La Estrella y en localidades vecinas de este pequeño pueblo toledano, va a ser muy difícil conciliar el sueño. Un incendio forestal, originado alrededor del mediodía por un accidente de tráfico, ha quemado a esta hora más de 2.200 hectáreas. Su voracidad es tal que, pasadas las diez de la noche, fue activada la UME (Unidad Militar de Emergencias) para tratar de controlar las llamas. Porque ha subido a nivel 2 y esto significa una alerta, un riesgo alto. Desde que se detectó el fuego por un vigilante, numerosos efectivos y medios aéreos y terrestres se han esforzado denodadamente en la zona por extinguirlo. En estos momentos, en medio de la oscuridad de la noche, hay 28 medios terrestres y 137 personas. Trabajan con la seguridad de que la carretera TO-1195, entre La Estrella y La Nava de Ricomalillo, está cortada al tráfico rodado. Además de La Estrella , con sus 300 habitantes, otros tres municipios llevan confinados por precaución: Fuentes, La Nava de Ricomalillo y Aldeanueva de Barbarroya . Se quiere así evitar que el humo afecte a sus paisanos, a los que este mediodía les sobresaltaba el incendio, provocado por un accidente entre dos vehículos en el término municipal de La Estrella. Ocurría en el kilómetro 24 de la CM-4100, en el paraje El Jabalí, y uno de los vehículos resultaba calcinado. El fuego prendió el pasto y el matorral, lo que alimentó las llamas contra las que seguirán luchando esta noche.
