La compraventa de viviendas saldó la primera mitad de 2024 en la provincia con subida , debida únicamente al muy buen comportamiento del segmentos de los pisos nuevos, según los datos que difundió ayer el Instituto Nacional de Estadística (INE). Antes de entrar en materia, hay que reseñar dos cuestiones relevantes. Una es que este ente público facilitó las inscripciones en el Registro de la Propiedad de junio , pero hay operaciones materializadas en meses anteriores, con el acuerdo previo entre partes y el paso por el notario. Ello implica que las tendencias del mercado inmobiliario se puedan reflejar diluidas. El otro elemento a tener en cuenta es que se viene de un 2023 de impacto de la subida de los tipos de interés , que se saldó con un descenso interanual de las ventas de hogares del 3,6% -se alcanzaron las 8.153 unidades comercializadas- tras un 2022 excelente. En ese ejercicio, se cerraron 8.462 operaciones. Para encontrar un número mayor, hay que retroceder a 2007 -cuando la burbuja del ladrillo empezaba a pincharse-. Entonces, fueron 11.015. En los seis primeros meses de 2024, en Córdoba se comercializaron con éxito 4.594 viviendas . Esa cifra implica un crecimiento del 3% respecto al mismo periodo del ejercicio anterior al contabilizarse 133 pisos más que hallaron comprador. El único protagonista de ese incremento fue el segmento de los hogares nuevos . De enero a junio, se vendieron 1.150 mientras que al ecuador de 2023 se llegó con una cifra de 822. Al cruzar ambos datos, se obtiene un incremento que acaricia el 40% (+328). Existe un grupo de población en la provincia con ingresos suficientes para superar sin problemas que el precio del dinero haya subido -se atisba, eso sí, a partir de ahora un escenario en el que los tipos bajen - o que la economía no termine de avanzar al ritmo que debería. Ello les da capacidad para adquirir hogares a estrenar, más caros que los de segunda mano. A esta demanda se une la existencia en la capital de una buena oferta de nuevas promociones. La clave del crecimiento de este segmento inmobiliario estuvo en un excelente comportamiento de las operaciones de viviendas a estrenar en el primer trimestre : el aumento interanual en enero fue del 95%, para dispararse luego en febrero al 109,3% y al 146,6% en marzo. Luego, llegó un bimestre de caídas, pero en junio el comportamiento volvió a ser positivo. En el sexto mes, se vendieron 145 pisos de primera mano. Fueron siete más que en 2023, con lo que el aumento fue del 5,1%. Por el contrario, el pilar de esta actividad, las viviendas de segunda mano , no logra resultados positivos. De enero a junio, se pusieron en el mercado con éxito en la provincia 3.444 pisos de esta tipología . En la primera mitad del pasado ejercicio, esa cifra se situó en los 3.639. Es decir, se produjo una caída del 5,4% al contabilizarse prácticamente 200 operaciones menos. Tras un arranque de año con enero en positivo, encadenó dos caídas. En febrero, fue del 12,2% y en marzo del 15,3%. Hubo tregua en abril (+39,1%). Pero en mayo regresó la senda descendente, con el peor dato del ejercicio: -22,7% . Y en junio, se siguió la tendencia, con una disminución del 17%. Habrá que observar la evolución del precio del dinero para ver si este segmento puede iniciar una mejoría. Viene ya de una caída del 7,7% sufrida en 2023. El pasado año, el incremento se debió única y exclusivamente al buen comportamiento del segmento residencial de primera mano (+19%). El crecimiento que se ha logrado en el primer semestre en Córdoba contrasta con la caída experimentada en el conjunto del país . En España, la venta de pisos sufrió un descenso del 4,5%. De esa bajada tiraron las operaciones con hogares de segunda mano, con una caída del 6,3%. El incremento de la comercialización de pisos nuevos (+3,4%) no bastó para que el saldo fuera positivo.