En los últimos años, la industria de los videojuegos ha crecido rápidamente en todo el mundo, y América Latina no es la excepción. La región ha visto un aumento significativo en el número de jugadores, gracias a la accesibilidad de los dispositivos móviles, la expansión del internet y el mayor interés en el entretenimiento digital. Esto ha convertido a varios países latinoamericanos en mercados clave para desarrolladores y empresas tecnológicas.
El impacto de los videojuegos en la cultura y la economía de Latinoamérica es evidente. Además de ser una fuente de entretenimiento, han creado nuevas oportunidades de negocio, empleo y desarrollo tecnológico. La creciente comunidad de gamers ha impulsado la creación de eventos, torneos y plataformas de streaming, permitiendo a los jugadores compartir su pasión y habilidades con una audiencia global. El país que encabeza este fenómeno en la región tiene a más del 50% de su población disfrutando del "gaming".
México se destaca en América Latina con más del 50% de su población jugando videojuegos, según el portal de proyecciones Statista, lo que lo convierte en el líder de esta actividad. Este crecimiento se debe al acceso a celulares, consolas, ordenadores, junto a las mejoras en internet y campañas de marketing efectivas, además de colaboraciones con desarrolladores de juegos.
También ha habido un aumento en la creación de contenido de videojuegos en plataformas como Twitch y YouTube. Los gamers se han vuelto influencers con millones de seguidores, lo que les permite generar ingresos a través de patrocinios y donaciones. Esto ha abierto nuevas oportunidades económicas y permite que muchos jóvenes conviertan su pasión en una carrera rentable.
México no es el único país destacado en videojuegos en América Latina. Argentina ocupa el segundo lugar en la región, con el 48% de su población enfocada en esta práctica gracias al desarrollo de la infraestructura digital y la alta penetración de diversos dispositivos de sobremesa y móviles. El mercado de este rubro en Argentina ha crecido de manera sostenida con más ventas de juegos y consolas.
Colombia sigue de cerca, con el 45% de su población involucrada en videojuegos. Este crecimiento se debe a una combinación de jóvenes entusiastas de la tecnología y una comunidad activa de desarrolladores de juegos. La colaboración entre empresas tecnológicas y el sector educativo ha fomentado el desarrollo de habilidades y talentos. De esta manera, este país se consolida como un actor importante en el mercado de América Latina.
Perú ha experimentado un notable aumento en el número de gamers, con un 42% de la población participando en videojuegos, impulsado por la accesibilidad de consolas y computadoras en diversos estratos sociales y la expansión del acceso a internet. La comunidad gamer en Perú es muy activa en plataformas de streaming y redes sociales.
Este crecimiento ha generado nuevas oportunidades económicas. Empresas locales están invirtiendo en el desarrollo de videojuegos y en la organización de eventos y torneos que promocionan la competitividad, atrayendo patrocinadores y audiencias internacionales. Los sistemas de pagos digitales también han impulsado la industria y permite a los usuarios acceder a varios servicios de forma rápida y sencilla.
