Sólo en el último año se han detectado en Estados Unidos 267 personas afectadas por este enfermedad casi desconocida
Las sartenes y cacerolas antiadherentes son ya imprescindibles en las cocinas de todo el mundo. Pero su capacidad para evitar que la comida se queme en el fondo de los utensilios de cocina no está exenta de peligro si no se utilizan de forma correcta.
El teflón es la marca comercial del politetrafluoroetileno (PTFE), propiedad de The Chemours Company. Fue descubierto de forma accidental por Roy J. Plunkett en 1938 y su principal característica, además de la antiadherencia, es que es prácticamente inerte. Es decir que no reacciona con otras sustancias químicas excepto en situaciones muy especiales. Además, es muy flexible, tiene un bajo coeficiente de rozamiento, gran impermeabilidad y es un buen aislante aislante eléctrico.
El teflón es capaz de soportar temperaturas desde –270 C hasta 270 C . Y aquí surge el problema del que alertan las autoridades estadounidenses. Los utensilios de cocina con este antiadherente dejan de ser seguros cuando se superan esas temperaturas, ya que el revestimiento se puede degradar y emitir vapores tóxicos.
Cuando una olla o sartén de teflón se calienta a más 260º emite unos gases tóxicos que son peligrosos para la salud humana. Y es que el mal uso de estas sartenes antiadherentes y su repercusión negativa en la salud humana ha aumentado considerablemente el número de enfermos.
Sólo en el último año se han detectado en Estados Unidos 267 personas afectadas por la “gripe del teflón” o “fiebre de los polímeros”, una enfermedad casi desconocida. Una cifra muy alta si se tiene en cuenta que entre 2006 y 2012 se notificaron un promedio anual de 9 casos y en los últimos 20 años se han detectados un total de unos 3.600.000 casos, según los Centros de Intoxicaciones de EE UU (America’s Poison Centers) citados por el Washington Post.
Gran parte de estas exposiciones al politetrafluoroetileno se producen en el hogar y son el resultado de la inhalación de vapores emitidos por sartenes revestidas de PTFE sobrecalentadas.
El riesgo de inhalación de esta vapor tóxico aumenta si los utensilios de cocina calentados están secos. Es decir, si se puso una sartén a precalentar al fuego sin agregar aceite o se evaporó el agua de una olla. Según el Instituto Nacional de la Salud de EE UU (NIH), la exposición al PTFE de un utensilio de cocina con aceite es poco común.
Por ello, los expertos piden no precalentar las cacerolas y sartenes con teflón antes de su uso y poner la campana extractora o abrir las ventanas mientras se utilizan. Además, recomiendan cocinar a temperaturas medias o bajas para evitar las emisiones de gases tóxicos y no utilizar sartenes rayadas o que han perdido parte del teflón por el uso.
Esta enfermedad, causada por la inhalación de los vapores tóxicos que se liberan al calentar en exceso estos utensilios, puede provocar síntomas similares a la gripe común y de ahí su nombre.
Los síntomas de la "gripe del teflón" van desde fiebre a escalofríos, opresión en el pecho, tos seca, dolor muscular o de cabeza y suelen aparecer entre las 12 y 24 horas después de la exposición a los gases tóxicos. Habitualmente, la enfermedad cursa sin problemas graves y el tratamiento, al igual que en una gripe normal, está dirigido a mitigar los síntomas.
