El Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados (AyA) confirmó este viernes que el río Barranca ya no presenta contaminación por el químico agrícola derramado por un camión en una de las cuencas el pasado 27 de julio.
Luego de seis días, más de 100.000 habitantes de los cantones de Esparza y Puntarenas volverán a tener acceso al agua potable a partir del sábado 3 de agosto.
En una rueda de prensa, el presidente del AyA, Juan Manuel Quesada Espinoza, detalló que los niveles promedio del químico en el agua del río, al inicio de la emergencia, eran de casi 40.000 microgramos por litro. El martes, estos disminuyeron a 629 microgramos, y los resultados de las muestras tomadas los días miércoles y jueves confirmaron la ausencia de contaminación.
“Estamos listos para operar de nuevo la planta potabilizadora de Barranca y los Pozos. Con esta medida iniciaremos el llenado de los tanques de inmediato, y a partir de mañana 3 de agosto, el agua comenzará a distribuirse de manera gradual”, comentó Quesada.
La distribución, según informó el jerarca, se realizará primero a los sectores bajos de los cantones y, posteriormente, esta llegará a las localidades más elevadas durante la noche del sábado y la mañana del domingo. Además, Quesada resaltó que en el caso específico de Esparza, se realizó una limpieza de tanques y a las 5 p. m. de este viernes inició su proceso de llenado.
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Hasta el momento, los vecinos de Esparza y Puntarenas han tenido que obtener agua a través de sistemas de distribución de agua alternativos. Entre ellos, se utilizaron camiones cisterna, vehículos tipo pick-up y vagonetas municipales para llevar el líquido a las comunidades.
Asimismo, se habilitaron dos pozos, los cuales proporcionaron agua potable a 16 localidades adicionales y beneficiaron a 20.350 personas. De acuerdo con el AyA, esto aseguró que el agua que llegaba al distrito Gran Chacarita, a través de las tuberías, fuera apta para el consumo humano.
Específicamente, en el cantón de Esparza se abrió, desde el lunes 29 de julio, un tanque de almacenamiento que abastece a 7.315 personas y que está destinado únicamente para labores de aseo. Además, se pusieron a disposición de los vecinos tres cisternas, cuatro vehículos tipo pick-up y un camión para distribuir agua.
El AyA colaboró con la Comisión Nacional de Emergencias (CNE) para llevar a cabo el traslado de dos tanques de 10.000 litros, que fueron instalados el miércoles 31 de julio en puntos estratégicos.
