La alerta alimentaria que salió a la luz el pasado mes de mayo por unos encurtidos que se estaban comercializando en nuestro país y que no eran aptos para la salud , ha llegado a su fin. La Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aesan) ha compartido a través de su perfil de X la actualización de este caso. Los productos afectados por la alerta incluían un cóctel de aceitunas (vendido en distintos formatos), aceitunas partidas Jaén (en envases de 9 kg) y piparras dulces en aceite de oliva (en tarros de 1,6 kg y 220 g). La empresa valenciana Olives Corbí ha sido la responsable de que se encontrasen estos alimentos en latas oxidadas , en algunos casos con fechas de consumo que sobrepasaban los cinco años. Actualmente , y según la Aesan, las materias primas utilizadas en estos momentos para elaborar dichos productos s on correctas y se han reincorporado al mercado, a excepción de algunos lotes que se reitraron desde el momento en el que salió la alerta. Esto se explica, porque para poder vender en su momento los productos no aptos, la empresa Corbí los mezclaba con otros que sí lo eran en proporciones en torno al 10 por ciento. Es por esto que se inmovilizaron 80 toneladas del producto y se procedió a la detención del gerente de dicha empresa por atentar contra la salud pública. El peligro de esta acción tuvo gran repercusión , puesto que los productos habíán sido distribuídos por varias comunidades autónomas como Cataluña, Comunidad Valenciana, Cantabria, Comunidad de Madrid, Andalucía, Islas Baleares, Murcia, Extremadura y Castilla-La Mancha. De hecho, la denuncia fue puesta por las autoridadeas de la Comunidad Valenciana, para que comprobasen la retirada de los productos afectados de todos estos canales de comercialización. Sea como sea, y así lo ha destacado la Aesan en su publicación, es importante que se revise en cada domicilio que no se tenga ninguno de los productos afectados y, si es así, desecharlos inmediatamente.