En plena expansión del rechazo social hacia la masificación del turismo por sus efectos negativos, España registra cifras históricas en llegadas de turistas internacionales durante el primer semestre, tal y como vaticinaba el sector. 42,5 millones de turistas extranjeros visitaron España en los primeros seis meses de 2024, un 13,3% más frente al mismo periodo del año pasado y un nuevo máximo. Y su desembolso también fue récord: gastaron 55.570 millones de euros (20,6% más), según los datos difundidos este viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE). El mes de junio también batió marcas con 9,3 millones de turistas, un 12,1% más que en el mismo de 2023, que gastaron 12.373 millones de euros (+16,6%). Así, el sector turístico español deja atrás definitivamente los fantasmas de la pandemia y enfila un año de registros inéditos unas vez se contabilicen los meses de julio y agosto, los de mayor afluencia turística.
Los británicos y los alemanes siguen siendo los turistas que más eligen España como su destino vacacional. En concreto, de Reino Unido llegaron 8,49 millones de turistas en el primer semestre, un 10,1% más, y de Alemania 5,5 millones, un 10,9% más. El tercer país emisor fue Francia, con 5,44 millones de visitantes (+12,9%). Estos concentraron también la mayor parte del gasto. No obstante, el mayor repunte fue el de los turistas belgas: llegaron 1,3 millones, un 22,5% más respecto al mismo periodo de 2023.
Los viajeros internacionales apuestan cada vez más por alojarse en pisos turísticos en plena ofensiva del Gobierno contra estos arrendamientos y otras modalidades de alquiler como el temporal y por habitaciones, que han proliferado en el último año en detrimento del arrendamiento de carácter habitual para esquivar los topes al precio del alquiler de la Ley de Vivienda. Según la encuesta del INE, los pisos de alquiler fue la modalidad de alojamiento que mayor crecimiento experimentó en el primer semestre (+29,7%) y en el mes de junio (+27,6%): 5,14 millones de turistas eligieron este alojamiento en el primer semestre y 1,09 millones en junio.
Pese a ello, los que eligen los hoteles para hospedarse siguen pesando más: 28,1 millones entre enero y junio (+11%). Así, el número de turistas que utilizaron alojamiento de mercado como modo principal aumentó un 13,3% en tasa anual durante el primer semestre y un 12,1% en junio, mientras que el alojamiento de no mercado (vivienda propia, de familiares o amigos) repuntó un 12,4% entre enero y junio y un 24,6% sólo en el mes de junio.
La duración de la estancia mayoritaria entre los turistas en junio fue de cuatro a siete noches, con casi 4,7 millones y un aumento anual del 10,1%. El número de visitantes se incrementó un 1,9% entre los que no pernoctan (excursionistas) y un 11% entre los turistas con mayor duración (más de 15 noches). El gasto medio por turista fue de 1.329 euros, con un incremento anual del 4%. Por su parte, el gasto medio diario creció un 1,9%, hasta los 196 euros. El gasto en transporte internacional (no incluido en paquete turístico) fue la principal partida en junio, con un 21,4% del total del gasto y un aumento del 18,4% respecto al mismo mes de 2023.
En el acumulado de los seis primeros meses de 2024 las comunidades que más turistas recibieron fueron Cataluña (9,1 millones y un aumento del 12,4% respecto al mismo período de 2023), Canarias (7,5 millones y un incremento del 10,6%) y Andalucía (6,3 millones, un 14% más). Mientras, en el mes de junio, Islas Baleares fue el primer destino de los turistas, concentrando el 23,6% de las llegadas (2,19 millones, un 6,7% más). Le siguieron Cataluña (2 millones de turistas, un 21,5% más) y Andalucía (1,36 millones, un 14,7% más). El número de turistas que visitaron Cataluña aumentó un 10,1% y a Andalucía vinieron un 18,2% más.
Precisamente, ha sido en estas regiones más atractivas para los turistas internacionales donde han proliferado las protestas para exigir límites al turismo. Pese a que esta actividad sigue siendo el principal motor económico español, el modelo que domina en algunas ciudades y regiones, masificado y dañino para el acceso a la vivienda y el medio ambiente, ha disparado la "turismofobia". En este sentido, a finales de julio, el ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu, pidió a las comunidades autónomas que tomasen medidas para "modular" la oferta de turismo en sus territorios, con el fin de evitar este fenómeno.
