Bielorrusia es el único país de Europa que sigue aplicando la pena de muerte. Su presidente, Alexander Lukashenko, tiene, en última instancia, el poder del indulto, que acaba de conceder al ciudadano alemán Rico Krieger . Tras ser sentenciado a la pena capital por un delito de terrorismo del que se declaraba inocente , la semana pasada fue publicado un vídeo en la televisión estatal bielorrusa en el que Krieger se declaraba culpable, pedía clemencia a Lukashenko y criticaba a las autoridades alemanas por no estar haciendo nada para salvar su vida. La decisión de último minuto de sustituir la ejecución por la cadena perpetua ha sido saludada por el Ministerio de Asuntos Exteriores alemán, uno de cuyos portavoces ha...
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