Talgo ha comunicado a Skoda que no tiene interés en la propuesta de fusión lanzada por la compañía checa la semana pasada. En una carta firmada por el presidente del fabricante de trenes español , Carlos de Palacio, Talgo dice no estar interesada en explorar alternativas que no sean una oferta pública de adquisición (opa) «que garantice los recursos financieros e industriales que permitirán a Talgo hacer frente a sus desafíos presentes y futuros». Es decir, que no estudiarán ninguna proposición a una contraopa que mejore a la que tiene actualmente en estudio por el escudo antiopas, el consorcio húngaro Ganz-Mavag (Magyar Vagon), como indica en la misma misiva remitida este martes a la CNMV. Es una carta que sirve para replicar a la enviada por Skoda la semana pasada donde detallaba el contenido de su oferta tras ser requerida una semana antes por el consejo de administración de Talgo. El máximo órgano de Gobierno del fabricante de trenes se había reunido este martes para analizar la propuesta checa de «combinación industrial» entre ambas empresas. Pero era esta una respuesta esperada, dado que Trilantic, el accionista mayoritario de Talgo con el 40% de los títulos, se ha declinado desde un primer momento por aceptar una oferta por el 100% del capital social de la empresa, lo que obligatoriamente conlleva la formulación de una opa. «Observamos que no tienen intención alguna de iniciar una oferta pública de adquisición para competir con la lanzada por Ganz-Mavag Europe Zrt por el 100% de las acciones de Talgo», señala de Palacio en la misiva desvelada hoy tras la reunión. «En vista de lo anterior, habiendo tenido en cuenta los intereses de los accionistas, empleados y otras partes interesadas de Talgo, el consejo de administración considera que, en esta etapa, no es el momento adecuado para explorar alternativas potenciales distintas a una oferta pública de adquisición competitiva», le especifica Talgo a su homólogo centroeuropeo. La de Skoda es una oferta que viene patrocinada por el Gobierno y que a priori obtendría la vía rápida para ser ejecutada. El Ejecutivo tiene entre ceja y ceja la opa magiar por unos supuestos lazos del grupo con Rusia y por su vinculación al Gobierno de Viktor Orbán, al que tildan de ultraderechista, quien está presente en el consorcio a través del fondo estatal Corvinus. Pero ni Talgo ni sus accionistas están dispuestos a pasar por el aro si no es a cambio de una oferta que mejore a la de Magyar Vagon, que ofrece cinco euros por acción y pagaría un montante total de 620 millones de euros, como le han hecho saber al Ejecutivo en las últimas semanas. Desde Skoda, en todo caso, califican la misiva de Talgo como «inesperada» «Nos sorprende la respuesta del consejo de administración de Talgo de no continuar nuestro diálogo sobre la colaboración industrial, dados los beneficios materiales reales que se derivarían de dicha colaboración para todas las partes interesadas», apuntan fuentes del grupo checo a este periódico. El Grupo Skoda insiste en que su propuesta ofrece la mejor alternativa para el fabricante español «y seguiremos destacando los posibles beneficios de nuestra oferta».
