La avenida más ancha del mundo se encuentra en un país de Sudamérica y es uno de los íconos más reconocidos de su capital, considerada
En el corazón de un vibrante país de Sudamérica se encuentra la avenida más ancha del mundo. Con sus imponentes 140 metros de ancho, esta avenida es una maravilla arquitectónica y un símbolo del progreso y modernidad de la ciudad que la alberga. Además de su ancho, la avenida es notable por su longitud y su papel central en la vida urbana y cultural de la metrópolis.
Esta vía, con sus amplios carriles y zonas verdes, es una arteria vital que conecta puntos clave de la ciudad. Alberga monumentos históricos y edificios emblemáticos, siendo un reflejo de la rica historia y el dinamismo contemporáneo del país. Es también un importante centro de actividades y eventos, tanto políticos como culturales.
La avenida más ancha del mundo se encuentra en Buenos Aires, la capital de Argentina. La avenida 9 de julio, con sus impresionantes 140 metros de ancho y 3,5 kilómetros de longitud, es una de las arterias más importantes de la ciudad. Este emblemático bulevar, inaugurado en 1937, fue diseñado por el arquitecto y paisajista francés Carlos Thays. A lo largo de su recorrido, la avenida alberga monumentos y lugares históricos que son clave en la vida cultural y social de Buenos Aires.
La historia de la avenida 9 de julio comienza a fines del siglo XIX. Bajo la intendencia de Francisco Seeber, se iniciaron los primeros planes para su construcción. En 1912, la ley N° 8.885 permitió la expropiación de terrenos necesarios, pero fue recién en 1937 cuando se inauguró oficialmente, durante la presidencia de Agustín P. Justo. El tramo inicial comprendía solo 500 metros entre las calles Viamonte y Bartolomé Mitre. La avenida fue completada en su forma actual en 1980, tras décadas de ampliaciones y mejoras.
La avenida 9 de julio es conocida mundialmente por sus 140 metros de ancho, distribuidos en 16 carriles. Entre sus características más destacadas están los numerosos árboles que adornan su recorrido, incluyendo jacarandás, ceibos y cerezos, muchos de ellos donados por Japón. Esta avenida también es hogar de importantes puntos de interés como el Obelisco, el Teatro Colón, la Plaza de Mayo y la Estación Constitución.
Sin embargo, la avenida 9 de julio enfrenta una controversia respecto a su título de la más ancha del mundo. En 2006, el Libro Guinness de los Récords otorgó este título al Eje Monumental de Brasilia, que cuenta con 250 metros de ancho. No obstante, muchos sostienen que el Eje Monumental no cumple con los criterios estrictos para ser considerado una avenida, ya que está compuesto por dos autopistas separadas por un parque central. En contraste, la avenida 9 de julio cumple con todas las características de una avenida urbana, con flujo continuo de tráfico y rodeada de edificios y veredas.
