Un oficial de policía en Inglaterra fue suspendido tras ser filmado pateando y pisoteando la cabeza de un hombre durante una detención en el aeropuerto de Manchester. El incidente ocurrió el 23 de julio y fue captado en un video que rápidamente se viralizó en redes sociales, generando indignación y protestas masivas. De acuerdo a lo citado por el medio ecuatoriano El Tiempo, el cuerpo policial "reconoce preocupaciones sobre la conducta vista en el video".
La Policía de Manchester confirmó la suspensión del oficial y anunció que el caso fue remitido a la Oficina Independiente de Conducta Policial (IOPC) para una investigación completa e independiente. Por su parte, Andy Burnham, alcalde de la ciudad, declaró para el medio BBC y calificó las imágenes de "muy perturbadoras" y aseguró que la suspensión del agente es la decisión "correcta".
Burnham hizo un llamado a la calma y pidió que las protestas frente a la comisaría de Rochdale cesen. Cabe indicar que, ante la difusión del vídeo, un portavoz policial aseguró que los agentes habían sido golpeados y tirados al suelo tras intentar arrestar a unos sospechosos acusados de agresión y riña, que incluso podrían haberles quitado las armas reglamentarias.
El abogado de la familia del hombre agredido, Akhmed Yakoob, informó que su cliente sufrió una grave lesión cerebral debido a la agresión. "El joven ahora tiene un quiste en el cerebro, lo que ha empeorado su condición de salud", citó el medio The Mirror. Además, el representante legal reveló que la familia está profundamente afectada y pide una investigación exhaustiva y transparente.
Durante el video, se observa al policía armado con una pistola Taser dando una patada en la cabeza al joven que está en el suelo y luego pisoteándolo. La víctima se encuentra boca abajo y junto a él hay una mujer con un hiyab. Otros oficiales presentes en la escena ordenan a los espectadores que se alejen. El policía uniformado ataca al hombre dos veces mientras lo inmoviliza en el suelo.
La IOPC aseguró que llevará a cabo una investigación rigurosa y que se entrevistará al oficial bajo precaución criminal. “Podemos confirmar que estamos llevando a cabo una investigación penal sobre el uso de la fuerza durante los hechos que tuvieron lugar el 23 de julio en el aeropuerto de Manchester. Estamos organizando una entrevista con un agente de policía bajo advertencia penal lo antes posible", afirmó Catherine Bates, directora regional de la IOPC.
Ante los hechos, la Policía de Manchester emitió un comunicado en el que primero reconoce que se trata de "un evento que es realmente impactante y que, con razón, preocupa a la gente. El uso de tal fuerza en un arresto es un hecho inusual y que entendemos crea alarma". No obstante, la Policía explicó qué los hechos se dieron "durante el intento de arrestar a uno de los sospechosos", además de indicar que a "una agente le rompieron la nariz".