Descubre toda la información sobre el santo de hoy, viernes 26 de julio 2024. El santoral de la Iglesia Católica y su historia en La Razón
El santoral, también conocido como calendario litúrgico, es un libro religioso que contiene la lista de los santos reconocidos por la Iglesia Católica y que se celebra cada día del año. Más allá de una simple lista de nombres, el santoral representa un viaje fascinante a través de la fe, la historia y la cultura cristiana.
No solo es un libro religioso, sino también un reflejo de la cultura cristiana. A través de las festividades y tradiciones asociadas a cada santo, podemos conocer las costumbres, creencias y valores que han moldeado la sociedad a lo largo de los siglos. Desde las grandes fiestas patronales hasta las devociones locales, el santoral nos permite conectar con la riqueza y la diversidad del mundo cristiano.
En el corazón de la historia sagrada, encontramos a Santa Ana y San Joaquín, venerados como los padres de la Santísima Virgen María y abuelos de Jesucristo. A pesar de que la Biblia no ofrece muchos detalles sobre sus vidas, la tradición y la devoción popular los han convertido en figuras queridas y ejemplares.
Según la tradición, Ana era hija de Matat y hermana de María, abuela de Juan Bautista. Se la describe como una mujer piadosa y dedicada a la oración. Joaquín, por su parte, provenía de la tribu de Leví y era conocido por su bondad y generosidad.
Ana y Joaquín contrajeron matrimonio con un profundo amor y un fuerte compromiso con Dios. Anhelaban tener hijos, pero durante muchos años la espera se vio frustrada. A pesar de la tristeza, nunca perdieron la fe ni la esperanza, entregando su aflicción a Dios y confiando en su voluntad.
En su vejez, Dios concedió a Ana y Joaquín el don más preciado: el nacimiento de su hija María. La tradición narra que un ángel se les apareció en sueños anunciándoles la llegada de una hija bendita por Dios. El nacimiento de María llenó de alegría y gozo sus corazones.
Ana y Joaquín dedicaron su vida a criar a María con amor y devoción, inculcándole valores como la fe, la obediencia y la bondad. Le transmitieron su profunda espiritualidad y la prepararon para la misión extraordinaria que la esperaba como madre del Salvador.
Santa Ana y San Joaquín fallecieron antes de la crucifixión y resurrección de Jesús. Sin embargo, su legado de amor, fe y dedicación familiar ha trascendido los siglos. Son venerados como patrones de los abuelos, de los matrimonios y de las familias, y se les invoca para pedir por la gracia de tener hijos, por la protección de las familias y por la intercesión en momentos difíciles.
Su festividad se celebra hoy 26 de julio, conmemorando su aniversario de bodas. Son considerados santos patronos de diversas localidades alrededor del mundo, y su presencia en el arte religioso es notable.
En la pequeña isla de Malta, durante la primera mitad del siglo XX, un sacerdote llamado Jorge Preca se convirtió en una figura emblemática de la fe y la caridad, venerado como San Jorge Preca. Su vida, dedicada a la predicación del Evangelio y al servicio de los más necesitados, lo llevó a fundar la Sociedad Misionera de Malta, una organización que continúa su legado de amor y compasión.
Jorge Preca nació en Valletta, Malta, el 12 de febrero de 1881. Desde pequeño, mostró una profunda inclinación hacia la fe y una gran sensibilidad hacia los más necesitados. A los 16 años ingresó al seminario diocesano, donde se destacó por su inteligencia y piedad.
En 1905, Jorge Preca fue ordenado sacerdote y comenzó su ministerio en la parroquia de Hamrun. Su entrega y dedicación lo convirtieron en un referente para la comunidad, especialmente para los jóvenes. En 1910, fundó el Círculo Misionero, un grupo de jóvenes dedicados a la evangelización y la promoción de la caridad.
En 1918, con el objetivo de ampliar su labor misionera y servir a los más necesitados, Jorge Preca fundó la Sociedad Misionera de Malta. Esta organización se dedicaba a la evangelización, la educación, el cuidado de los enfermos y la asistencia social. Preca se convirtió en el primer Superior General de la Sociedad, guiándola con sabiduría y compasión.
Era conocido por su profundo amor por los pobres y los marginados. Dedicaba gran parte de su tiempo a visitarlos, escucharlos y brindarles apoyo material y espiritual. Su mensaje de caridad y esperanza resonó en el corazón de muchos, inspirándolos a seguir el camino del amor y el servicio al prójimo.
En 2001, el Papa Juan Pablo II beatificó a Jorge Preca durante una visita pastoral a Malta. En 2020, el Papa Francisco lo canonizó, reconociendo su santidad y su legado como un ejemplo excepcional de fe, caridad y servicio al prójimo.
San Jorge Preca nos invita a vivir una fe auténtica, comprometida con el amor y la caridad hacia los demás. Su mensaje de esperanza y compasión sigue inspirando a personas de todo el mundo a buscar el bien común y a servir a los más necesitados.