México podría redefinir su futuro económico y ambiental y convertirse en una potencia energética sustentable.
Con una ubicación geográfica que nos otorga más de 300 días de sol al año, tenemos una oportunidad única para convertirnos en líderes globales en energía solar. Imaginemos un México donde Solmex, en lugar de Pemex, se convierte en el motor de nuestra economía, impulsando un desarrollo sustentable y generando miles de empleos en el proceso. Esta visión no es una utopía, sino una realidad alcanzable si aprovechamos el inmenso potencial solar que nuestro país ofrece.
México tiene una posición geográfica privilegiada que le otorga una ventaja natural en la producción de energía solar. Nuestro país recibe, en promedio, entre 4.5 y 6.5 kWh/m² de radiación solar diaria, una de las más altas del mundo. Esto nos coloca por delante de muchos países que ya han adoptado ampliamente la energía solar. Aquí un ranking de países con mayor potencial solar, medido en términos de radiación solar promedio diaria:
1. Chile: 6.5 - 7.5 kWh/m²
2. Australia: 5.0 - 6.0 kWh/m²
3. México: 4.5 - 6.5 kWh/m²
4. Estados Unidos (Sudeste): 4.5 - 6.0 kWh/m²
5. India: 4.5 - 6.0 kWh/m²
6. Sudáfrica: 4.5 - 6.0 kWh/m²
7. Arabia Saudita: 4.0 - 6.0 kWh/m²
8. España: 4.0 - 5.0 kWh/m²
9. Brasil: 4.0 - 5.0 kWh/m²
10. Alemania: 2.9 kWh/m²
Pero, el potencial de energía solar en México no se limita solo a la cantidad de sol que recibimos. Nuestro país cuenta con una vasta extensión de terrenos disponibles para el desarrollo de proyectos solares. Con más de 1.96 millones de kilómetros cuadrados, México tiene el espacio necesario para construir instalaciones solares a gran escala sin interferir significativamente con otras actividades económicas.
Considerando tanto la radiación solar como la disponibilidad de terreno, México se posiciona en primer lugar, de los países más competitivos para la producción de energía solar. Aquí un ranking que incorpora estos factores:
1. México
2. Australia
3. Estados Unidos
4. Chile
5. India
6. Sudáfrica
7. Arabia Saudita
8. España
9. Brasil
10. China
Aprovechar este potencial no solo contribuiría significativamente a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, sino que también impulsará la economía nacional. La industria de la energía solar puede generar miles de empleos directos e indirectos, desde la construcción y mantenimiento de parques solares hasta la investigación y desarrollo de nuevas tecnologías. Además, la transición hacia una economía basada en energías renovables atraerá inversiones extranjeras, fomentando el crecimiento económico y la innovación.
La comparación con otros países nos permite dimensionar mejor las oportunidades que tenemos frente a nosotros. China, por ejemplo, es el mayor productor de energía solar en el mundo, con una capacidad instalada de más de 200 GW. Sin embargo, la radiación solar promedio en China es inferior a la de México.
Si México aprovechara su potencial solar al máximo, podríamos no solo satisfacer nuestra demanda energética, sino también exportar energía limpia a países vecinos, convirtiéndonos en un centro energético de la región. Se estima que si México utilizara solo una fracción de su territorio adecuado para la instalación de paneles solares, podríamos generar suficiente energía para ser totalmente autónomos y aún así tener un excedente significativo.
Este excedente podría abastecer de energía a países como Guatemala, Belice y Honduras combinados, durante todo el año.
Las políticas públicas juegan un papel crucial en esta transformación. Es vital que el gobierno mexicano fomente la inversión en energías renovables a través de incentivos fiscales, subsidios y marcos regulatorios favorables. La reciente reforma energética debe ser vista como una oportunidad para reorientar los esfuerzos hacia el desarrollo sostenible y la independencia energética. Además, la colaboración entre el sector público y privado será esencial para materializar esta visión.
En términos de costos, la energía solar se ha vuelto cada vez más competitiva. El costo de los paneles solares ha disminuido drásticamente en la última década, haciendo que la energía solar sea más asequible que nunca. Según la Agencia Internacional de Energía Renovable (IRENA), el costo nivelado de electricidad (LCOE) para la energía solar ha caído un 82% desde 2010. Esta tendencia continuará, haciendo de la energía solar una opción no solo ambientalmente responsable, sino también económicamente viable.
México está en una posición envidiable para liderar el mundo en la producción de energía solar, una oportunidad que se da una vez en muchas generaciones.
Con abundancia de radiación solar, vastos terrenos disponibles, y una economía que puede beneficiarse enormemente de la transición hacia energías limpias, el futuro de México como un gigante solar es potencialmente brillante.
Es hora de que dejemos atrás la era de Pemex y enfoquemos nuestros esfuerzos en el futuro, con un enfoque a crear una potencia mundial de energía renovable, capitalizando nuestra ventaja natural para construir un futuro más sostenible y próspero.
Te leo en mis redes sociales.
Hasta la próxima, Manuel.