El acuerdo en el Parlamento Europeo permite dejar a los ultras de Patriotas por Europa fuera de los puestos de representación institucional. No obstante, el Partido Popular Europeo protege al grupo de Meloni y los ultraconservadores polacos
La Eurocámara aplica el cordón sanitario a Le Pen pero no a Meloni
La mano tendida del PP a la extrema derecha en España ha hecho aflorar la contradicción de Alberto Núñez Feijóo, cuyo partido aplica en Europa un ‘cordón sanitario’ al grupo del que forman parte sus socios de Vox, con quienes mantiene los acuerdos municipales incluso después de la ruptura de Santiago Abascal a nivel autonómico por el reparto de menores migrantes que han llegado solos a Canarias.
Mientras que Feijóo protege sus alianzas y evita entrar en el cuerpo a cuerpo con el líder de la extrema derecha, el Partido Popular Europeo margina al grupo del que forma parte Vox, que se ha aislado con la decisión de cambiar a la ultraderechista Giorgia Meloni –blanqueada en Bruselas por los populares– y los ultranacionalistas polacos de Ley y Justicia (PiS) por los radicales del Rassemblement National de Marine Le Pen, La Liga de Matteo Salvini o Viktor Orbán.
A pesar de que Patriotas por Europa es la tercera fuerza en el Parlamento Europeo, se ha quedado fuera de todo el reparto del poder gracias al ‘cordón sanitario’ aplicado por el resto de grupos desde los populares hasta la izquierda. “No queremos que esos eurodiputados representen al Parlamento Europeo”, dijo el portavoz del PPE, Pedro López de Pablo, sobre la exclusión de esos partidos en el reparto de los puestos institucionales.
El grupo del que forma parte Vox se quedó fuera de las 14 vicepresidencias de la Eurocámara para evitar, en palabras del PPE, que la “extrema derecha” y los “amigos de Putin” ocuparan cargos institucionales que, en buena medida, suponen la representación del Parlamento Europeo. Los populares, eso sí, dejan fuera de ese cordón sanitario a los Conservadores y Reformistas (ECR), el grupo al que pertenecía Vox la anterior legislatura. De hecho, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, siempre ha dejado abierta la puerta a pactar con fuerzas de ese espectro que considera “proeuropeas, pro-Ucrania y pro-estado de derecho” frente a las más radicales, como Alternativa por Alemania, por ejemplo.
El aislamiento de Vox tras ese cambio ha quedado especialmente explícito este martes durante el procedimiento de composición de las comisiones parlamentarias en el que su grupo, Patriotas por Europa, ha quedado fuera de todas las presidencias y vicepresidencias. En los casos en los que se ha votado, el embudo les ha excluido eligiendo a los otros aspirantes. Se ha producido, por ejemplo, en el caso de la Comisión de Medio Ambiente en la que se ha presentado el jefe de la delegación de Vox, Jorge Buxadé, a la cuarta vicepresidencia, pero ha recaído en un eurodiputado húngaro del PPE gracias a la alianza del resto de fuerzas.
Vox tendrá, por tanto, menos peso este mandato del que tuvo en el anterior en el que Mazaly Aguilar fue tercera vicepresidenta de la comisión de Agricultura. Ahora la extrema derecha quedará al margen de esos puestos, previsiblemente también en las delegaciones parlamentarias que se constituirán en septiembre. En el periodo anterior, Hermann Tertsch era uno de los vicepresidentes de la que se encarga de las relaciones con América Latina.
A Tertsch, no obstante, le ha dolido especialmente el reparto de la Comisión de Libertades Civiles, Justicia e Interior (LIBE) que presidirá el popular español Javier Zarzalejos y que tendrá en una de las vicepresidencias a la representante de Sumar, Estrella Galán, del grupo La Izquierda, que se ha impuesto en la votación a la propuesta de los ultras. “Feliz con su presidencia y feliz con que el filoterrorismo tenga una vicepresidencia”, ha reprochado al dirigente del PP.
“Las fuerzas que están en esta reagrupación defensiva con las peores fuerzas de Europa, la extrema izquierda y los simpatizantes del terrorismo, se están agrupando con socialistas y PPE para hacer una única política: política contra los Patriotas”, ha dicho Tertsch en una rueda de prensa que ha convocado su grupo para quejarse tras los actos de composición de las comisiones. Los eurodiputados de la ultraderecha han reprochado el “acoso” y la “atrocidad” contra las “fuerzas que cada vez tienen más peso en Europa”.
A pesar de que mantienen los acuerdos en los ayuntamientos con Vox en España al tiempo le aplican el veto en Bruselas, la número dos del PP de Feijóo, Cuca Gamarra, advirtió a sus socios del alineamiento ultra. “Preferimos seguir homologados con Europa que con las peligrosas amistades que han comenzado a frecuentar últimamente”, le ha dicho Gamarra a la bancada de Abascal durante el debate de la renovación del Consejo General del Poder Judicial, informa Alberto Ortiz.
En el reparto de los puestos de las comisiones, que se hace mediante el sistema d’Hont y a partir de un acuerdo entre las principales familias políticas, tres eurodiputados españoles presidirán comisiones: Javier Zarzalejos (PP), la de Libertades Civiles, Justicia e Interior; Lina Gálvez (PSOE), la de Derechos de la Mujer e Igualdad de Género; y Carmen Crespo (PP), la de Pesca.
Además de presidir las reuniones, el rol de los presidentes es representar a ese organismo dentro y fuera del Parlamento y presidir las delegaciones que participan en negociaciones interinstitucionales con el Consejo y la Comisión sobre textos legislativos. En caso de ser necesario, los sustituyen los vicepresidentes.
Esther Herranz (PP) será vicepresidenta primera de la comisión de Medio Ambiente, Salud Pública y Seguridad Alimentaria; Hana Jalloul (PSOE) ocupará ese puesto en la de Asuntos Exteriores; y Dolors Montserrat (PP) en la de Peticiones. La jefa de la delegación española presidió la pasada legislatura esa comisión que la derecha utilizó sistemáticamente para armar bronca y atizar al Gobierno de Pedro Sánchez. Ahora su puesto lo ocupará el polaco de la extrema derecha del PiS Bogdan Rzońca, al que el PPE no le impone el cordón sanitario.
La exministra de Igualdad Irene Montero (Podemos) ocupará la segunda vicepresidencia de la comisión de Derechos de la Mujer y de Igualdad de Género, que preside la socialista Lina Gálvez y que tendrá como vicepresidenta tercera a Rosa Estarás (PP). El bureau (la mesa de la comisión) no se ha votado en este caso y todos los nombramientos han salido por aclamación.
El exdirigente de Ciudadanos Adrián Vázquez, ahora en las filas del PP, será vicepresidente tercero de la Comisión de Asuntos Constitucionales. En la anterior legislatura, presidió la de Asuntos Jurídicos, un puesto que le dio mucha visibilidad durante la tramitación de los suplicatorios de los líderes independentistas. Ahora, sin embargo, figura como suplente en ese organismo.
Finalmente, la eurodiputada de ERC Diana Riba será vicepresidenta tercera en la comisión de Cultura y Educación y, como se ha mencionado, Estrella Galán será la cuarta en la comisión de Libertades Civiles, Justicia e Interior.
