La implementación de la política de cielos abiertos avanza en la Argentina. Tras la desregulación del sector aerocomercial -el Gobierno la oficializó hace dos semanas mediante la publicación de la modificación del Código Aeronáutico-, ya son varias las líneas aéreas que quieren operar o ampliar su presencia en el mercado doméstico.
En este contexto, tres aerolíneas buscan mantener una ruta anual con Bariloche, una de las ciudades turísticas más visitadas de la Argentina.
Tal es el caso de la chilena Sky, que, recientemente confirmó a El Cronista sus intenciones de aterrizar en la Argentina y empezar a operar vuelos domésticos, aunque está a la espera de una "señal de crecimiento del mercado". Así, la línea aérea de bajo costo aumentó la frecuencia para la ruta Santiago-Bariloche de cara al receso invernal.
Además, ejecutivos de la empresa que tiene negocios compartidos con Aerolíneas Argentinas ya que a fines de mayo firmó un acuerdo interlineal con para conectar más de 60 ciudades de la región, adelantaron a funcionarios de la localidad sus intenciones de mantener la conectividad todo el año, enfocado en el turismo estudiantil.
Latam Airlines, por su parte, anunció que, de cara a la temporada de verano volverá a operar la ruta que conecta a la ciudad de Bariloche con Santiago. La conexión se suma a la operación que la aérea chilena ofrece en la Argentina desde Buenos Aires, Córdoba, Mendoza y Salta. A su vez, a partir de diciembre, también empezará a volar a la ciudad de Rosario.
Esta conexión no sólo permitirá y facilitará la mayor llegada de turistas chilenos a la Patagonia, sino que a través del centro de conexión que Latam tiene en Santiago de Chile, el sur argentino se conectará con más de 10 destinos internacionales como Australia, Brasil, Colombia, Ecuador, los Estados Unidos y Perú.
La panameña Copa Airlines, también busca expandir su actividad en la Argentina. De hecho, cuenta con un total de 54 vuelos semanales al país, aunque busca ampliar aún más su presencia. En septiembre empezará a volar la ruta Panamá-Ezeiza, hasta ahora nunca operada por la aerolínea.
Todas las aeronaves que despegan desde alguna ciudad del interior de la Argentina vuelan de forma directa hacia Panamá, sin hacer escala en la Capital Federal. Copa tiene vuelos a Panamá desde Rosario, Córdoba y Mendoza. La ruta con Salta se interrumpió en marzo de 2020 y todavía no se reactivó, pero el plan es retomarla pronto.
Las modificaciones que hizo el Gobierno en el Código Aeronáutico se hicieron "con el fin de aumentar la competitividad, desregular la actividad y sumar jugadores en el mercado aerocomercial local", según establece el documento que se publicó en el Boletín Oficial hace dos semanas.
Los principales cambios de la norma son la posibilidad de cada aerolínea de elegir su propio servicio de rampa, la liberación contractual, lo que permitirá a las líneas aéreas a realizar sus propios contratos con la única aprobación de la ANAC -anteriormente limitado- y la quita de privilegios de franja horaria y capacidad aeroportuaria para Aerolíneas Argentinas.
"La política aeronáutica argentina ha limitado fuertemente el desarrollo de la industria aerocomercial", dispone el escrito oficial. Así, establece que la actividad en la Argentina "debe regirse por los principios de libre acceso a los mercados, lealtad comercial, desregulación tarifaria, estricto resguardo de la seguridad operacional y la seguridad en la aviación".
Esto, expone el Gobierno, será beneficioso, tanto para operadores aéreos, como para consumidores, quienes podrán acceder a una amplia red de rutas, así como también serán alcanzados por la optimización de los servicios y la simplificación en la planificación de viajes.
