Llegó a sus oídos que un pastor de 65 años de un pueblo de Salamanca buscaba «una relación estable de matrimonio con alguna mujer« y aprovechó esta información para acercarse a él y entablar un noviazgo »completamente falso«, que tenía como »único fin ir obteniendo del mismo los beneficios económicos que le fueran posibles«. Le sacó un piso y viendo que no lograría más le dejó. Cuatro años después se confiesa culpable de la estafa y ha conseguido eludir la cárcel. Los hechos se remontan a abril de 2020 esta ciudadana portuguesa de 34 años le «hizo creer» que tenía «intención» de casarse a la víctima . Empezó así una relación epistolar a través de Whatsapp con la que se fue ganando su 'amor' y confianza, de acuerdo con la sentencia por conformidad de la Audiencia Provincial de Salamanca por la que se la condena a dos años de cárcel que sin antecedentes quedan suspendidos. En realidad se vieron personalmente en no más de tres o cuatro ocasiones y siempre acompañados de otras personas, pero el hombre - «ingenuo» y «fácilmente influenciable»- cayó en sus redes. La estafadora consiguió que le realizar a varias transferencias para comprar una vivienda en la que poder vivir juntos y con los hijos de ella -los movimiento tenían que ser a la cuenta de una amiga para que no le «quitaran» las prestaciones sociales de las que era beneficiaria-. Tan sólo dos meses después de empezar esta relación, y con la condición de la estafadora de que «para casarse» le comprar una casa en Zamora -él era pastor en un pueblo de poco más de un centenar de habitantes- realizó, así, una cuantiosa transferencia, pero cuando llegó el momento de firmar las escrituras, y por consejo de un amigo que sospechaba de un posible « engaño «, él puso la vivienda a nombre de los dos. Ella vio que ya no obtendría más y »comenzó a poner excusas para no encontrarse y suprimiendo cualquier contacto«. Ni siquiera le dio las llaves de la casa. El pasado 16 de julio la acusada ratificó en la vista oral el acuerdo de conformidad al que había llegado con la Fiscalía. En concreto, el fallo la condena por un delito de estafa a una multa de 1.080 euros y dos años de cárcel, que, no obstante, y pena cuya ejecución queda suspendida al reunir la acusada los requisitos, condicionada a que pague la citada cuantía impuesta y no delinca en el plazo de dos años. Se declara la nulidad parcial de la escritura de la compra de la vivienda en Zamora, quedando como único titular la víctima, que renuncia a indemnización por el resto de gastos en torno la vivienda que asumió -gastos, muebles...-. En total, las cantidades entregadas por ascendieron a 100.954,36 euros , de las cuales 62.435,19 euros se acotan a la compra de la casa y el resto a esos otros desembolsos.
