El tránsito por el bajo Los Ledezma, entre Pavas y la Uruca, volverá a cerrar para completar las labores en el nuevo puente.
El paso por el bajo Los Ledezma, entre Pavas y La Uruca, estará cerrado durante una semana, desde las 6 a. m. del viernes 26 de julio hasta las 5 a. m. del lunes 5 de agosto. Posteriormente, habrá cierres durante los cuatro fines de semana siguientes del mes de agosto.
El Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) informó de que esta suspensión es necesaria para ejecutar las labores finales en el nuevo puente que se construye sobre el río Torres. Los trabajos incluyen la construcción de accesos, colocación de la losa de la estructura y remoción de los puentes modulares que se instalaron en esa zona.
En la primera fase del cierre, se completarán los trabajos asociados al sistema pluvial, los accesos al puente y la construcción completa de la estructura de pavimento, desde la subbase granular hasta la losa, para permitir el paso por el nuevo puente a dos carriles. Quedarán pendientes las labores de restitución del derecho de vía, construcción de barreras y demarcación.
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Durante la segunda etapa, se realizará el desmontaje de los puentes bailey que se colocaron para permitir el paso durante las obras. Esa labor se llevará a cabo durante los fines de semana de agosto entre las 6 a. m. del sábado y las 5 a. m. del lunes. Los cierres se efectuarían los días 10 y 11; 17 y 18; 24 y 25 y 31 de agosto, así como el 1.º de septiembre.
Según el MOPT, el nuevo puente tiene un 85% de avance y quedaría habilitado a inicios de septiembre. La nueva estructura tendrá 30 metros de longitud, carriles de 3,15 metros de ancho y aceras peatonales de 1,65 metros a ambos lados.
Adicionalmente, se colocarán barandas de protección tipo New Jersey y tipo flex beam en las aproximaciones; se construirán cuatro muros y, en las bases del puente, habrá un enrocado tipo escollera para proteger las fundaciones de la estructura.
De acuerdo con los datos del Ministerio, se mejoró la capacidad de la sección hidráulica al elevar el puente para que esté en condición de dar cabida a las avenidas máximas del río estimadas para los próximos 100 años. Como parte de la obra, se construirá un tramo para que los usuarios que ingresan por el sector norte puedan realizar el giro y se llevarán a cabo labores en los sistemas de drenaje para mejorar la capacidad de la sección hidráulica de la nueva estructura.
La estructura tiene un costo de $1,5 millones y se ejecuta como parte del Programa Red Vial Cantonal-MOPT-BID. Al inicio de los trabajos, el cierre de la estructura, sin adecuados planes de manejo de tránsito, provocó un colapso vial que afectó las principales arterias del área metropolitana y obligó al gobierno a ejecutar acciones de emergencia, incluyendo el teletrabajo, horarios ampliados de trenes, modificaciones viales y operativos de tránsito.
