Marc Cucurella, lateral del Chelsea y de la selección española, sorprendió a todos con un nuevo look, que rápidamente se ha vuelto viral en redes sociales.
Marc Cucurella se ha convertido en uno de los grandes protagonistas de la Eurocopa 2024, no solo por su destacada actuación en el torneo, sino también por su particular promesa. El jugador del Chelsea FC prometió teñirse el pelo de rojo si España ganaba la competición, y fiel a su palabra, ha cumplido.
El lateral español ha enamorado a los aficionados con su juego limpio, su carisma y su icónica melena. El campeonato de 'La Roja' fue celebrada con gran entusiasmo, y Cucurella no tardó en cumplir el reto que prometió, compartiendo su nuevo look en las redes sociales para deleite de sus seguidores.
Marc Cucurella, conocido por su distintivo cabello rizado y su juego incansable, ha sorprendido a todos al teñirse el pelo de un llamativo color rojo. Este cambio radical fue la promesa que hizo antes de la final de la Eurocopa 2024. La esposa del futbolista reveló en una entrevista en el programa Espejo Público que, aunque no estaba dispuesto a cortarse la melena, sí había apostado por teñirla en caso de victoria.
El nuevo look de Cucurella se mostró al mundo a través de su cuenta oficial de Instagram, donde publicó una foto con el título "Lo prometido es deuda". La imagen rápidamente se volvió viral, acumulando miles de likes y comentarios. Los seguidores del Chelsea y de la selección española aplaudieron su gesto y su sentido del humor, consolidando aún más su popularidad.
El desempeño de Marc Cucurella en la Eurocopa 2024 fue fundamental para que España lograra su cuarta corona en la competición. A sus 25 años, el lateral del Chelsea fue una pieza clave en el esquema del seleccionador Luis de la Fuente. Solo se perdió el tercer partido de la fase de grupos contra Albania, y fue sustituido en el minuto 66 del encuentro de octavos de final contra Georgia.
Cucurella destacó no solo por su solidez defensiva, sino también por su contribución en ataque. Fue el autor de la asistencia a Mikel Oyarzabal para el gol que selló la victoria de España en la final contra Inglaterra. Este momento será recordado como uno de los más icónicos de su carrera y de la historia reciente del fútbol español.
