Fitch Ratings ratificó la calificación de incumplimiento de emisor de largo plazo en moneda extranjera de México en ‘BBB-’ con perspectiva estable.
“La calificación de México está respaldada por un marco de política macroeconómica prudente, finanzas externas estables y sólidas y una relación deuda pública/PIB que Fitch proyecta se mantendrá por debajo de la mediana ‘BBB’”, dijo la agencia.
De acuerdo con la calificadora, la nota de México está limitada por débiles indicadores de gobernabilidad, un historial de desempeño moderado de crecimiento a largo plazo y riesgos fiscales y crecientes rigideces presupuestarias.
La agencia resaltó la victoria de Claudia Sheinbaum, en las elecciones presidenciales del 2 de junio de 2024 de manera aplastante, convirtiéndose en la primera mujer presidenta de México.
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“Sheinbaum recibió el 59% de los votos, más del 30% por encima de su competidor más cercano, Xóchitl Gálvez, y el mayor margen de victoria en una elección presidencial mexicana desde 1982. Los resultados señalan una amplia continuidad política y solidifican el amplio apoyo político del partido Morena”, dijo.
Fitch resaltó que los resultados electorales preliminares sugieren que Morena, junto con sus aliados, puede obtener suficiente apoyo legislativo para aprobar enmiendas constitucionales.
La agencia también anticipó un déficit del gobierno general del 5,4% del producto interno bruto (PIB) en 2024 y del 4% en 2025, frente al 3,6% en 2023 y un promedio del 2% del PIB durante 2015-2019.
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“El presupuesto de 2024 incluía un déficit fiscal del Sector Público No Financiero superior al 5% del PIB, el punto más alto en más de tres décadas. La administración entrante heredará un déficit significativo causado por el aumento del gasto social y los mayores costos de endeudamiento”, dijo.
Para la agencia, si bien la administración entrante apunta a reducir el déficit a niveles consistentes con una trayectoria estable de deuda sobre PIB, persiste la incertidumbre sobre cómo y con qué rapidez se logrará esto, lo que tal vez solo se vuelva más claro una vez que se proponga el presupuesto para 2025.
“El apetito político por una reforma para mejorar la recaudación de impuestos sigue sin estar claro. Anticipamos que la deuda pública aumentará al 49% del PIB en 2024 desde el 46% en 2023, aunque se mantendrá muy por debajo de la mediana ‘BBB’ del 55%. Nuestras proyecciones indican un aumento gradual a medio plazo hasta el 52,8% en 2026″, dijo.