El arbitraje en el futbol mexicano siempre ha sido un tema para debatir, con decisiones polémicas que terminan afectando un partido o hasta un campeonato pero según un análisis del Observatorio del Futbol CIES, que evaluó 71 torneos locales de todas las confederaciones entre febrero de 2023 y febrero de 2024, la Liga MX ocupa el puesto número 53 en cuanto a faltas señaladas por partido, con un promedio de 23.14. Este número indica que los árbitros en México tienen una tendencia moderada a sancionar faltas en comparación con otras ligas, es decir, que el juego en México se vuelve lento y con poco flujo de juego, ya que disminuye el tiempo de juego efectivo.
En contraste, la Eredivisie de los Países Bajos, conocida por su juego más fluido y menos interrupciones, registra el menor promedio de faltas con 19.96 por partido. Por otro lado, la Serie B de Brasil tiene la mayor cantidad, con 30.34 faltas señaladas por encuentro. Este dato refleja estilos de juego y criterios arbitrales variados, donde la Liga MX se encuentra en una posición intermedia, ni demasiado permisiva ni excesivamente estricta.
El uso de tarjetas amarillas es otro aspecto crucial para evaluar el arbitraje. En este rubro, el Campeonato Uruguayo lidera con un promedio de 6.07 tarjetas amarillas por partido. La Liga MX se encuentra en la posición 18, con 5.03 tarjetas por encuentro, lo que significa que los árbitros en México muestran una tarjeta amarilla cada 4.6 faltas aproximadamente. En comparación, la media global de las 71 competencias es de una tarjeta amarilla cada 5 faltas.
Este dato sugiere que los árbitros mexicanos son relativamente más estrictos al momento de amonestar a los jugadores, posiblemente en un esfuerzo por mantener el control del juego y prevenir el juego brusco.
En cuanto a expulsiones, la Liga MX está en la novena posición, con un promedio de 0.36 tarjetas rojas por partido. Esto coloca al torneo mexicano en el grupo de ligas donde se expulsa a los jugadores con mayor frecuencia. La Primera División de Bolivia ocupa el primer lugar en este aspecto, con 0.61 expulsiones por partido, mientras que la J2 League de Japón tiene el menor número, con solo 0.10 expulsiones por encuentro.
Este alto índice de expulsiones en la Liga MX puede indicar una aplicación rigurosa de las reglas del juego por parte de los árbitros o una tendencia a sancionar severamente las infracciones graves.
El tiempo añadido es otro factor interesante. La Liga MX es una de las ligas que más minutos adicionales concede, con un promedio de 11.33 minutos por partido, situándose en el séptimo lugar a nivel mundial en este rubro. La Stars League de Catar es la competición que más tiempo añade, con 13.49 minutos por partido, mientras que la Super Liga de Eslovaquia concede solo 5.58 minutos de compensación en promedio.
El tiempo añadido puede ser una respuesta a diversas situaciones en el partido, como lesiones, revisiones del VAR y sustituciones, reflejando la intención de los árbitros de asegurar que se juegue el tiempo reglamentario completo.
El arbitraje en la Liga MX presenta características particulares que lo posicionan de manera específica en varios aspectos comparativos a nivel mundial. Con un número moderado de faltas señaladas, una tendencia a mostrar tarjetas amarillas con mayor frecuencia que la media global, un índice alto de expulsiones y un tiempo añadido considerable, el arbitraje mexicano destaca por su estricta aplicación de las reglas y su esfuerzo por mantener el control del juego.
