El Ayuntamiento de Sevilla se va a reunir con el Consejo de Cofradías y el Arzobispado este viernes para solventar las diferencias en cuanto al recorrido de la procesión magna del 8 de diciembre como culminación del II Congreso Internacional de Hermandades y Piedad Popular tras desautorizar el paso por el Paseo de Colón. Sin embargo, fuentes municipales han explicado a ABC de Sevilla que esta vía «de por sí no es un espacio inseguro, celebrándose en él eventos como La vuelta, la Nocturna o la Maratón , e incluso el paso de cortejos en Semana Santa. Lo que lo hacen inseguro son algunos condicionantes». Uno de ellos es el «contexto de la fecha, coincidente con el Puente de la Inmaculada , que en base a estadísticas de años anteriores son los días con mayor afluencia público en las calles de Sevilla. Se espera un millón de personas por la relevancia del acontecimiento». También, en los informes se apuntaba que «afecta al Plan de Movilidad de Navidad , que facilita el acceso peatonal y en transporte público a las calles de San Jacinto y Asunción, así como todo su entorno». Otro aspecto que señalan desde el Consistorio es que es la «arteria principal de la ciudad que estaría cortada durante varios días: montaje, procesión Magna, desmontaje y limpieza conllevando un caos circulatorio ». Además, habría «cortes de tráfico desde La Palmera-Las Delicias, Torneo-Arjona, y la multitud de calles que desembocan en el recorrido oficial». Otros cortes serían los de «los puentes de Isabel II (Triana) y San Telmo, tanto para vehículos como viandantes, ya que el itinerario propuesto impide la salida y entrada por los mismos, viéndose bloqueados los barrios de Triana y Los Remedios». Recuerdan que «varios aparcamientos subterráneos quedarían anulados como el del Paseo Colón, avenida de Roma, Albareda, Plaza de la Magdalena, Altozano, Plaza de Cuba». Con respecto al transporte colectivo, se explica que «se vería seriamente afectado, cortando el eje norte-sur y comunicación de oeste-este de la ciudad y que coincidiría con el partido Betis-Barcelona , normalmente calificado como de alto riesgo, dificultando el corte de tráfico del Paseo Colón y Las Delicias por su conexión con la Avenida de la Palmera». Por otro lado, se destaca que ocuparían la vía pública «unas 25.000 sillas independientes, sin unir unas con otras, que dificulta la posible intervención de los servicios de emergencia y situaciones de peligro por el bloqueo de las mismas al poderse mover». Dentro de este punto, se apunta que «se compagina tal cantidad de sillas con público de pie de manera indeterminada en su parte trasera, provocando el bloqueo de su posible evacuación de una zona a otra» con un «peligro existente para el público en la margen del río debido a los desniveles existentes, con mayor énfasis en la caída para el Paseo de Marqués de Contadero» . La accesibilidad a la zona por parte de los Servicios de Emergencia «es desfavorable y la zona donde se encuentra los Jardines del Cristina con una visión de la procesión de 360 grados, crea una 'ratonera' al estar rodeada completamente por dicha procesión, sin posibles salidas expeditas». Con respecto a la limpieza de cera por maquinaria especializada para evitar riesgos de caídas, afectaría «gravemente al tiempo de corte de la arteria principal del Paseo Colón, ya que conllevaría una jornada completa añadida a los cortes ya existentes». •Cortando esta arteria principal de la capital, señalan fuentes municipales que «se dificulta gravemente la circulación, apeo y traslado a los estacionamientos que se habiliten de la gran cantidad de vehículos particulares y colectivos que se prevén que lleguen durante el Puente de la Inmaculada, creando graves problemas de acceso a la ciudad y posibles atascos kilométricos» . Todas estas circunstancias como los días de corte de tráfico, el Plan de Movilidad de Navidad, los cortes de dos puentes, la limpieza especializada de cera o la ocupación de las sillas conlleva «una clara diferenciación con otros eventos organizados en dicha vía».
