La inflación de la zona euro se moderó en junio hasta el 2,5% interanual, una décima por debajo de la subida de los precios observada en mayo (2,6%), que fue el primer incremento desde diciembre de 2023 y el mayor nivel registrado desde marzo, según datos de la oficina de estadística comunitaria Eurostat que confirman sus cálculos preliminares. Por su parte, la inflación en el conjunto de la Unión Europea se redujo también un décima, al 2,6%. En España, la inflación de los alimentos se moderó al 3,6%, frente al 3,8% de mayo, pero esta tasa situó a nuestro país como el tercero de la UE con la inflación más alta y el segundo de la eurozona. La inflación española es un 38% superior a la media de la UE y un 44% superior comparada con la de la zona euro.
Esta ligera moderación se explica porque la subida del precio de los alimentos frescos fue cinco décimas menor, del 1,8% de mayo al 1,3% de junio; la de los bienes industriales no energéticos repitió con una tasa del 0,7% y la inflación de la energía se situó en el 0,2% (frente al 0,3% del mes anterior).
En cambio, empujando al alza, el precio de los servicios repitió en junio como la categoría con una mayor inflación (del 4,1%, sin cambios con respecto al dato anterior), seguido de los alimentos procesados, el alcohol y el tabaco, con un alza de los precios del 2,7% que supone un descenso de una décima con respecto a mayo.
Con todo ello, la inflación subyacente de la zona euro -que excluye la energía, los alimentos frescos y el tabaco por su volatilidad; y es la referencia que utiliza el Banco Central Europeo (BCE) para fijar su política monetaria- se mantuvo estable en el 2,9%.
Los últimos datos publicados por Eurostat constatan que la inflación en los países del euro recupera la tendencia a la baja que había perdido en el mes de mayo, justo antes de que mañana tenga lugar una nueva reunión del BCE en la que se espera que la entidad deje intactos los tipos de interés tras haberlos bajado por primera vez hasta el 4,25% en su encuentro de junio.
La zona euro arrancó 2024 con un aumento de los precios del 2,8% en enero, que se moderó después hasta el 2,6% en febrero y el 2,4% en marzo y abril, antes de aumentar al 2,6% en mayo y volver a bajar el mes pasado al 2,5%. Por su parte, la inflación de la UE pasó de un 3,1% en enero, a aumentar un 2,8% en febrero, se moderó aún más en marzo, al 2,6%, para mantenerse estable en abril, repuntar al 2,7% en mayo y volver al 2,6% en junio.
Por países, España registró la segunda inflación más alta de la eurozona y la tercera de la UE con una tasa armonizada del 3,6%, sólo por detrás de Bélgica (5,4%) en el primer caso y también por Rumanía 5,3%), en el segundo. Cabe tener en cuenta que con el dato de junio, España registra la mayor inflación de las cuatro economías del euro (Francia, Alemania, España e Italia).
Hungría registró un aumento de los precios idéntico al de España y detrás se situaron Croacia (3,5%), Países Bajos (3,4%), Austria y Portugal (3,1%), Chipre (3%), Polonia (2,9%) y Luxemburgo, Estonia y Bulgaria (2,8%).
Francia, Grecia y Alemania registraron una inflación inferior a la media de la UE, pero superior a la de la eurozona, del 2,5% en los tres casos, y después de ellos se encuentran Eslovaquia (2,4%), Malta y República Checa (2,2%), Dinamarca (1,8%), Eslovenia (1,6%), Letonia e Irlanda (1,5%), Suecia (1,4%), Lituania (1%), Italia (0,9%) y Finlandia (0,5%).
