Las agencias federales han iniciado una investigación sobre el ataque, calificándolo como un intento de asesinato. Tanto republicanos como demócratas han condenado el incidente de manera unánime.
Este sábado, el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, fue objeto de un intento de asesinato durante un mitin en Butler, Pensilvania. Quedará en la historia el momento en que una serie de disparos interrumpieron el evento. Repentinamente, el líder republicano se llevó la mano derecha a la cara, se agachó y fue rápidamente rodeado por el servicio secreto. Una bala rozó su oreja.
El individuo que disparó fue neutralizado por los agentes de seguridad. Según información proporcionada por el Servicio Secreto, el tirador "realizó múltiples disparos desde fuera del recinto del evento".
Además, se informó que un asistente al mitin perdió la vida y otros dos resultaron gravemente heridos.
Las agencias federales han comenzado una investigación sobre el ataque, categorizándolo como un intento de asesinato, y hasta el momento el FBI no ha identificado al agresor. Tanto republicanos como demócratas, junto con la clase política estadounidense, han condenado firmemente el incidente de manera unánime, al igual que los principales líderes de la región.
En la rueda de prensa ofrecida esta noche por el FBI y otras fuerzas de seguridad se dejó claro que en los próximos días se enfocarán en la actuación del Servicio Secreto, encargado de la seguridad del evento de campaña en el que participaba el expresidente y donde ocurrió el ataque.
Cuando se le preguntó cómo fue posible que ocurriera un intento de asesinato en esas circunstancias, el agente especial del FBI Kevin Rojek afirmó que se llevará a cabo una extensa investigación para determinar lo sucedido, cómo el agresor pudo acceder al lugar y el tipo de arma utilizada. "Serán días, semanas, meses de investigación", dijo. "Es sorprendente, pero los detalles se revelarán más adelante en la investigación".
El individuo armado que intentó asesinar al expresidente Donald Trump el sábado ha sido identificado como Thomas Matthew Crooks, de 20 años, según informaron fuentes al periódico The Post.
Crooks, natural de Bethel Park, Pensilvania, disparó varios tiros durante un mitin al aire libre en Butler, en las cercanías de Pittsburgh, uno de los cuales rozó la oreja de Trump.
Según las fuentes, Crooks fue encontrado en el techo de una planta de fabricación, ubicada a más de 130 yardas del escenario, en el terreno del Butler Farm Show.
Fue neutralizado por francotiradores del Servicio Secreto, y más tarde se recuperó un rifle tipo AR.
Bethel Park es un pueblo que se encuentra a unas 40 millas al sur del lugar donde se llevó a cabo la manifestación en Butler.
No se sabe claramente por qué Crooks disparó contra el probable candidato presidencial republicano.
Margo Martin, miembro del equipo de Comunicaciones del expresidente Donald Trump, ha publicado un video del exmandatario bajando del avión por su propio pie en un aeropuerto de Nueva Jersey, donde se cree que pasará la noche. En su mensaje, la asistente escribió: "Fuerte y resiliente. Nunca dejará de luchar por Estados Unidos".
