Hoy no es un día cualquiera. Hoy es el encierro de los toros de Miura y además el cierre de la Feria de San Fermín. Lo que viene siendo pena máxima, a pesar del agotamiento absoluto porque Pamplona se lleva las energías de principio a fin.
Los compañeros de Onetoro nos invitan a ver el encierro justo a la entrada de Telefónica a la plaza. Todavía quedan tres minutos para que suene el cohete y vemos a los primeros corredores, los que ya sabemos que van a ser pitados a la entrada de la plaza. Aquí se nota el contraste entre un lado y otro. La línea divisoria.
Según avanzan los minutos la historia cambian y aunque hay gritos avisadores de "Cuidado", lo cierto es que cuando los toros se acercan todo cambia, las pisadas suenan como si fueran caballos, hasta la de los propios corredores y de pronto todo es un revuelo tremendo de miedo y emoción. Caídas, pisotones en ese "sálvese quien pueda" hasta llegar a la plaza o a un lugar seguro.
Hoy cumplen su carrera número 56 en 2024. Desde su debut se han ganado una fama peculiar, más que conocidos por su velocidad y su volumen. Son toros gigantones que asustan.
La carrera dura 2 minutos y 22 segundos. Cuadrado. Qué bárbaro, pero el peligro y la exposición ha guiado cada uno de ellos.
El parte provisional de heridos es que el encierro ha necesitados de cuatro traslados por distintas contusiones pero ninguna cornada por asta de toro.
Esta tarde volverán a salir los toros de Miura para ser toreado por Antonio Ferrera, Manuel Escribano y Jesús Enrique Colombo. Ferrera, con una extensa trayectoria en Pamplona, es el último torero en pasear un rabo en esta plaza y ha salido a hombros tres veces. Escribano, conocido por sus triunfos con Miura, celebra 20 años de alternativa y tiene una destacada historia en Pamplona. Colombo hizo historia el año pasado al convertirse en el primer venezolano en cortar dos orejas a un Miura en el siglo XXI.
