Nos encontramos en el mes de los circos y, como es bien sabido, en los meses previos, varios empresarios y artistas compiten por conseguir las mejores ubicaciones. No obstante, Edwin Sierra señaló que el éxito de una carpa no depende únicamente del lugar. El año pasado, el actor y locutor radial no pudo instalar su carpa en el distrito de San Juan de Miraflores porque Jorge Benavides consiguió el espacio antes que él.
En una transmisión en vivo a través de TikTok, Edwin Sierra comentó que recuperó su lugar en San Juan de Miraflores. A diferencia del líder del programa 'JB en ATV', el conductor de ‘Qumbias y risas’ afirmó que su espectáculo circense tiene mucho éxito en esa ubicación.
“Le va muy bien en la televisión, pero en vivo parece que no camina muy bien”, manifestó la figura de la Radio Nueva Q. “Gracias a Dios, al show del circo de Edwin Sierra, sí (le va bien). Tendríamos 25 haciendo circo, pero tuvimos dos años de pandemia donde no hicimos circo”, añadió.
Edwin Sierra, quien disfruta de las celebraciones por sus 25 años de trayectoria artística, se mostró emocionado porque a partir del jueves 18 de julio, volverá instalar su circo en el Instituto Gilda Ballivian (Av. Vargas Machuca 315, San Juan de Miraflores), donde el año pasado funcionó el Circo de la Tía Gloria, de Jorge Benavides.
Sierra, de 53 años, negó que él haya actuado mal. “ Entonces, (algunos dicen) como él revienta, yo me pongo allí a ver si me va bien, pero el público es quien decide”, declaró para La República. Además, afirmó que cada proyecto que ha liderado, ha sido un éxito.
El actor y comediante cuzqueño aprovechó para contar lo difícil que fueron sus inicios en el mundo del arte y todo lo que tuvo que hacer para salir adelante. Además, recordó lo que hizo con su primer sueldo.
—¿Qué significa cumplir 25 años de carrera artística?
—Realmente me siento emocionado, feliz y bendecido por Papá Dios, porque lograr mantener la carrera durante muchos años es un trabajo duro. Hay que reinventarse, hacer cosas nuevas y dentro de ellas he hecho teatro, televisión con mucho éxito, circo con llenos totales y de todo un poquito. Y este es el resultado.
—¿Al inicio de tu carrera, qué tuviste que hacer para cumplir tus sueños?
—Al inicio siempre es difícil, pues nadie cree en ti, son pocas las personas que dicen ‘sí, eres bueno, inténtalo, sigue y vas a triunfar’. Al principio siempre te dicen que ‘acá en el Perú no hay apoyo al arte’. Y es verdad, es difícil, pero somos luchadores, somos de raza inca. Bien tercos somos: nos cierran una puerta, abrimos otra, otra y otra.
—¿Has sido víctima de discriminación por ser de provincia?
—Soy de provincia, nacido en el Cusco, y por cosas de la vida mis papás fallecieron y a los 6 años me trajeron a Lima. Aquí me tocó vivir la vida real. Cuando uno es hijito de papá, tienes de todo, no me faltaba nada, pero en la vida real había que trabajar vendiendo chupetes, caramelos y limpiando lápidas en el cementerio. Fui asistente de brujo, he pintado casas, he sido mecánico, de todo.
—¿Crees que te va bien por haber trabajado con un brujo?
—No, yo creo en Dios. Él nos da la dicha, nos da el talento y a cada uno le toca aprovechar ese talento.
—¿Realmente son 25 años de carrera?
—Me inicié mucho más antes, desde niño, pero yo lo cuento desde que me pagaron mi primer sueldo formal, porque antes nada más me daban para el pasaje, para el sanguchito o para el ceviche.
—¿Recuerdas que hiciste con tu primer sueldo?
—Claro, le invité a comer a mis hermanos. Somos nueve hermanos y nos fuimos a comprar un pollito a la parrilla.
—¿Cómo piensas celebrar tus 25 años de carrera?
—Este domingo (14 de julio) están invitados en fronteras Unidas de Independencia. Van a estar Yarita Lizeth, La única tropical, La bella luz y el maestro ‘El Lobo’. ¿Qué más pueden pedir? Será un show para vacilar desde el mediodía, habrá comidita rica como en mi pueblo.
