El señor Jorge Gutiérrez tuvo, desde muy pequeño, una vocación por las matemáticas. Esto lo motivó a estudiar ingeniería civil en la Universidad Nacional de Ingeniería (UNI) con influencia, también, de su hermano mayor, quien estudió ingeniería industrial. “Siempre fui un alumno destacado en las aulas”, comenta Gutiérrez. Incluso, llegó a ser el número uno. Prueba de ello es que culminó la carrera en 5 años, a diferencia de otros compañeros que tardaron 6 años a más en terminar su etapa universitaria.
Tras su experiencia como topógrafo y después de estar trabajando intensamente durante casi 8 años, pudo crear, en el año 1996, el software AIDC-NS, un software revolucionario que integraba rutinas específicas para el diseño de carreteras con la potente plataforma de AUTOCAD y adaptado a la realidad nacional.
En esos años, la industria de la ingeniería civil carecía de herramientas específicas y eficientes para el diseño de infraestructuras. Pero Jorge, y su amor por las computadoras, vieron una oportunidad. “En la universidad llevé un curso de programación, lo que ayudó mucho a la creación del AIDC”, señaló.
“Nadie me ganaba en programación, esa afición la he tenido desde siempre, pero también fueron horas de amanecidas, porque lo tenía que hacer fuera del horario de trabajo. Había días que no dormía, no podía pegar los ojos hasta resolver los problemas. También había un algoritmo que se llamaba red de triángulos en el espacio y no me salía el algoritmo, pasaba días sin dormir”, comenta.
El impacto de AIDC-NS va más allá de su uso en proyectos de infraestructura, ya que también lo ayudó a formar ingenieros. Además, el software ha sido una herramienta educativa que ha capacitado a generaciones de ingenieros peruanos, brindándoles las habilidades necesarias para enfrentar los desafíos de la ingeniería civil moderna. “Hemos vendido 2 mil licencias, y cada una de ellas permitía hasta 10 usuarios”, añade.
El ingeniero Gutiérrez no solo creó esta herramienta tecnológica, también cambió la percepción de lo que es posible en la ingeniería nacional. Su software, específicamente diseñado para la realidad peruana, demostró que la ingeniería local puede competir y superar a las soluciones internacionales. “Yo creo que los ingenieros peruanos son altamente capacitados, lo demuestran en la práctica, lo que falta es más apoyo de parte de las autoridades locales”, sostuvo.
Gutiérrez vendió cada software a 1.000 dólares. Su software no solo simplificó el proceso de diseño, sino que también fue adoptado por numerosas instituciones, incluyendo la UNI, Provías Descentralizado y gobiernos regionales. En el extranjero también generó ganancias. “Vendí el software en países como Bolivia, Honduras y El Salvador”, indicó.
El ingeniero Jorge Gutiérrez cuenta con 39 años de carrera profesional. Trabajó 10 años en Provías Nacional, en la Oficina Técnica de Concesiones, así como en importantes proyectos de la Red Nacional.
Además, es fundador de la empresa AIDC Ingenieros Consultores S.A.C. El Software AIDC (Asistencia Integral para el Diseño de Carreteras), desde su primera aparición en el Perú el año 1996, desarrolló múltiples versiones y la actual es la AIDC NS Plus 2022.
