Todavía este viernes se esperan lluvias en la tarde en la mayor parte del territorio, pero a partir de este sábado el viento alisio y el polvo del Sahara marcarán el inicio de las canículas, con una merma en las precipitaciones en todo el Valle Central, Guanacaste y la mayor parte del Pacífico.
La inestabilidad que dejó la onda tropical N.° 18 en la atmósfera traerá lluvias este viernes por la tarde, pero no tan intensas como las que este jueves generaron 88 incidentes, la mayoría de ellos en San Carlos.
Para el fin de semana que viene, se espera que los vientos alisios se aceleren un poco y que arribe al país una pequeña nube de polvo seco proveniente del desierto del Sahara, en el oeste de África, por lo que se esperan condiciones de menos lluvias.
La fase de canículas, que comienza este fin de semana, se presenta todos los años en julio, al ingresar los vientos alisios por el Caribe, lo cual disminuye la formación de nubes y se debilitan las lluvias en todo el Valle Central, Guanacaste y el Pacífico, sin que eso quiera decir que desaparezcan del todo.
Además, inmersa en la nube de polvo del Sahara viene la onda tropical N.° 19, pero su influencia se prevé débil para la tarde del domingo, dijo José Pablo Valverde, del Instituto Meteorológico Nacional (IMN)
Para este viernes, las lluvias serán menos intensas que las de días atrás. En Alajuela y partes de Heredia, San José y Cartago se esperan aguaceros aislados. El viento alisio se mantendrá acelerado con ráfagas ocasionales en el Valle Central y Guanacaste, así como en las cordilleras del país, donde alcanzará hasta 70 km/h.
En el Caribe y la zona norte, que fue donde más llovió el jueves. El IMN registró acumulados de 134 litros por metro cuadrado o milímetros (mm) en Muelle de San Carlos y montos un poco más bajos en Aguas Zarcas y Ciudad Quesada.
Para la tarde y periodo nocturno, se espera un incremento en la cobertura nubosa en la zona norte así como una intensificación de las lluvias. Habrá aguaceros fuertes aislados, especialmente en zonas montañosas y alrededores de San Carlos, Sarapiquí, Pococí, Aguas Zarcas y Turrialba, entre otros. Se prevén máximos de hasta 70 mm de lluvia con posibilidad de valores superiores a 90 mm de forma localizada.
Para el Pacífico central y sur, se tiene probabilidad de aguaceros dispersos con tormenta eléctrica, principalmente en las zonas montañosas y alrededores de Pérez Zeledón, Buenos Aires, San Marcos, San Vito de Coto Brus y Laurel de Corredores.
Al centro y sur de la península de Nicoya y en los alrededores de las cordilleras de Guanacaste y Tilarán, las lluvias serán entre débiles y moderadas.
La Comisión Nacional de Emergencias informó que este jueves se atendieron 88 emergencias, principalmente al desbordarse los ríos Aguas Zarcas y San Rafael, en San Carlos, así como debido al colapso de alcantarillas que anegaron varias viviendas. Los trabajos de limpieza seguían esta mañana, así como los labores para restablecer una de las tomas de agua del acueducto de Boca Arenal, donde el servicio se restablecerá posiblemente en las próximas horas.
En La Palmera quedó un puente cerrado porque los accesos quedaron falseados y esta mañana equipos del Consejo Nacional de Vialidad y el comité local de emergencias realizaban las inspecciones en las bases de ese y otros puentes. La ruta N.° 748, que comunica Santa Rosa con el resto del distrito de La Palmera, quedó cerrada por las afectaciones. La CNE abrió un albergue en el Tecnológico de Florencia donde pernoctaron cuatro personas.
Se pide especial atención en esas regiones de la zona norte, debido a que las lluvias de las últimas horas mantienen los suelos con altos niveles de saturación, y eso aumenta la vulnerabilidad.
El 18 de julio del año pasado se detectó un deslizamiento en el Parque Nacional Juan Castro Blanco, San Carlos, que generó una serie de avalanchas luego de que más de 40 hectáreas de montaña bajaran por el cauce del río Aguas Zarcas y destruyeran casas, comercios y fincas en ese cantón.
Nueva avalancha de troncos y lodo desciende sobre el río Aguas Zarcas en San Carlos
