BAYAMO, Granma.— Muchos esperaban un duelo «de poder a poder», de batazos a granel y amplio carreraje en el estadio bayamés Mártires de Barbados. Sin embargo, Leñadores de Las Tunas y Alazanes de Granma se enrolaron en un partido en el que los artilleros no tuvieron protagonismo, sino los lanzadores.
Finalmente, en el primer choque de esta semifinal de la pelota cubana, los del hacha terminaron ganando 3-1, un aviso de que defenderán hasta con los dientes su condición de campeones nacionales.
El joven zurdo Eliánder Bravo, que no tuvo una etapa regular brillante (4-2 y PCL de 4,48), lanzó cinco entradas como un consagrado, riéndose de los bates de los Caballos, para llevarse el triunfo que rompe el hielo. Solo Osvaldo Abreu —quien le disparó dos cohetes— y Alexquemer Sánchez, autor del cuadrangular que le dio la carrera a los locales, pudieron conectarle con facilidad.
Eliánder se ha puesto más que bravo en los playoffs, pues en cuartos de final también fue dominante en dos partidos contra los Tigres de Ciego de Ávila, de modo que estas actuaciones de postemporada, donde ha cambiado por completo respecto a la fase clasificatoria, no parecen tan casuales.
Su relevista, Rodolfo Díaz, en cuatro capítulos de labor, también se vio suelto en la lomita, como si no enfrentara a una selección que bateó cósmicamente en los 75 juegos ordinarios de la serie.
En la trinchera contraria el diestro César García, que acababa de recuperarse del virus de Oropouche, no lo hizo mal durante seis episodios, pero aceptó las tres carreras decisivas (una en el primero y dos en el tercero) y se marchó con la derrota.
Vale resaltar que tuvo que esforzarse al máximo y olvidarse de las imprecisiones defensivas de sus compañeros, que cometieron cuatro errores, una cantidad superior a la que acumulaban en siete partidos.
Hasta ahora el lanzador de Campechuela no ha podido aportarle ni un solo éxito a su equipo, como tampoco el toletero Alfredo Despaigne ha conseguido impulsar una carrera desde la arrancada de los playoffs.
Este viernes, el zurdo Leandro Martínez, quien busca su victoria 100 en clásicos cubanos, intentará igualar las acciones para darle un respiro al timonel Ángel Ortega, que tal vez introduzca algún cambio en el line up.
Los pronósticos de este duelo están divididos, porque algunos consideran que debe respetarse la jerarquía de los Leñadores, actuales campeones nacionales, mientras otros aducen que los Alazanes fueron superiores en la subserie particular (4-1) y terminaron con mejores números globales.
Pero ya todo eso es «borrón y cuenta nueva», como se suele decir. Una victoria de los Leñadores los pondría muy cómodos, aunque Matanzas ya estuvo ganando así frente a los equinos y miren…
El otro desafío de semifinales marchaba 7-6 en el noveno acto, a favor de Pinar del Río, pero no pudo cantar victoria ante Industriales porque llegó la lluvia al estadio vueltabajero Capitán San Luis.
Las acciones continuarán este viernes a las 10:00 a.m. para definir el ganador del cotejo, que favorece 1-0 a los más occidentales.