Mario Balotelli finalizó su contrato con el Adana Demirspor de Turquía en el pasado mes de junio. El delantero de 33 años desea seguir activo en el fútbol y, pese a su controvertida carrera, tiene pretendientes. En las últimas horas se confirmó el principio de acuerdo con uno de los clubes históricos de Latinoamérica, en el que aparentemente solo falta su firma para formalizar la contratación.
Aunque hace algunos meses tuvo acercamientos con Boca Juniors, el club que desea hacerse con sus servicios pertenece a otra liga. Se trata de Corinthians, equipo que milita en la Primera División de Brasil (Brasileirão). El nuevo entrenador Ramón Díaz, quien asumió el cargo tras la salida del portugués António Oliveira, ha manifestado que necesita fichajes de renombre y con trayectoria, que le ayuden a enriquecer el nivel del combinado paulista.
Corinthians actualmente se encuentra en puestos de descenso en la liga doméstica, pero está clasificado a los octavos de final de la Copa Sudamericana. Por eso, la llegada del italiano sería clave para competir en todos los frentes que debe atender el equipo brasileño. Aunque al comienzo se veía complicado su arribo para el segundo semestre del año por el elevado costo que significaría su fichaje (salario mensual cercano a los 262.000 euros y una prima de fichaje de 1,4 millones de euros), el club se ha sabido mover y gracias a nuevos patrocinadores parece que han llegado a un acuerdo con Balotelli.
De concretarse su llegada, sería el segundo fichaje de renombre en el mercado de verano, debido a que ya se confirmó la incorporación de Philippe Coutinho al Vasco da Gama en condición de préstamo, debido a que sus derechos deportivos le pertenecen al Aston Villa de Inglaterra.
Balotelli está muy lejos de ser aquel jugador determinante que vistió las camisetas de varios de los clubes más grandes de Europa (Manchester City, Milan, Liverpool, Olympique de Marsella), que quedó campeón de la Champions League con el Inter de Milan o que representó a la selección italiana en 36 oportunidades. En su última temporada con el Adana Demirspor jugó 16 partidos, anotó 7 goles y dio 1 asistencia en un total de 939 minutos.
Todo indica que aún queda algo del jugador que hace un tiempo estuvo al mismo nivel de los mejores del mundo. Sin embargo, en Brasil preocupa los escándalos que durante toda su carrera lo han rodeado pero parece que la apuesta de Corinthians será darle la oportunidad de demostrarle al mundo de qué está hecho.