Asejer, la Asociación Sevillana de Jugadores de Azar en Rehabilitación ha atendido a 12.700 personas en 35 años de recorrido desde su fundación en 1989. Para celebrarlo, Asejer organiza este fin de semana, viernes 12 y sábado 13 de julio, en el Hogar Virgen de los Reyes de Sevilla, un programa de actividades que reúne desde mesas redondas sobre el impacto del teatro, la literatura o la publicidad en las adicciones comportamentales, como l a ludopatía ; hasta una representación teatral o una actuación musical a cargo de usuarios y socios de la entidad. Según explica José Jiménez , presidente de Asejer, «tras 24 años en la asociación, 20 en la junta directiva y los últimos 10 como presidente, la entidad y los servicios que ofrecemos se han transformado en función de las necesidades y la evolución en la tipología de los juegos y el perfil de los nuevos jugadores ». Asejer ha redoblado esfuerzos en la captación de la mujer jugadora que, según Jiménez, «sufre un doble estigma, por mujer y jugadora, y siempre ha sido muy difícil que se haga visible en el mundo de la rehabilitación, aunque estamos derribando esa muralla poco a poco». Respecto del futuro, el presidente de Asejer apuesta por seguir construyendo una asociación adecuada a los tiempos, a los nuevos tipos y formas de jugar y con especial dedicación a salvar las brechas de género en la captación de usuarios con necesidades de rehabilitación. Esa evolución en el perfil del usuario de los servicios de la asociación se percibe en la edad y el género de los usuarios. Mientras hasta hace una década la mayoría de las personas atendidas eran mayores de 40 años, desde 2020 más de un tercio son menores de 30 años . Y si hace tres décadas apenas había mujeres entre las personas atendidas, en la actualidad ya suponen el 13% de los jugadores que reciben ayuda de Asejer. Aunque la mayor parte de los jugadores que acuden a la entidad en busca de su ayuda reciben atención psicológica para combatir su adicción (el 72% de los usuarios), Asejer también ofrece servicios sociales, que presta al 28% de las personas atendidas. En muchos casos, la atención es combinada, psicológica y social. El programa de actividades conmemorativas del aniversario comenzará el viernes 12 de julio, a las 18.00 horas, con un acto institucional en el que, además de Jiménez, está previsto que participen Trinidad Rus, directora general de Atención Sociosanitaria, Salud Mental y Adicciones de la Junta de Andalucía; Silvia Pozos, delegada de Salud del Ayuntamiento de Sevilla; Mercedes Soriano, coordinadora provincial del Instituto Andaluz de la Mujer; Carmen Torres Moreno, presidenta de Feministas en Red y miembro del Consejo de la Mujer del Ayuntamiento de Sevilla; Máximo Enrique Gutiérrez, presidente de FEJAR (Federación Española de Jugadores Rehabilitados); y Francisco Abad, presidente de FAJER (Federación Andaluza de Jugadores Rehabilitados). A las 19.00 se celebrará una mesa redonda titulada Visualización de las adicciones comportamentales a través del Teatro y la Literatura, con la participación de Andrés Sierra, especialista en Arte Dramático, y José Manuel Marrodán, profesor de Lengua y Literatura; con la moderación de Mercedes Núñez, psicóloga de Asejer. La tarde se completará con la obra de teatro El guiño del reloj, escrita por la propia Núñez e interpretada por usuarias de la entidad. Ya el sábado, a las 10.00 horas, tendrá lugar la segunda mesa redonda, bajo el título ¿Qué influencia tiene la publicidad en las adicciones comportamentales?, con la participación de Manuel Sánchez, gerente de la empresa Marketing Directo y Publicidad, y de Alfonso Trujillo, informador y compositor, moderados por la periodista Alba Castillo. Las actividades conmemorativas concluirán con la actuación musical de Trujillo y con una clausura institucional. Tras las conmemoraciones, los socios y voluntarios de Asejer seguirán adelante con su propósito de ayuda tanto a jugadores como a sus familiares, con la esperanza de poder facilitar la rehabilitación de muchos más sevillanos que padecen este problema y con el sueño de que, algún día, su actividad deje de ser necesaria.