La Guardia Civil ha desarticulado un grupo criminal especializado en robos en viviendas y comercios, en los que empleaban extrema violencia y cuyas víctimas solían ser ciudadanos chinos . Según ha informado este jueves la Benemérita, La ' Operación Brigantes ' ha concluido con la detención de seis personas y se han practicado siete registros en las provincias de Madrid, Málaga y Almería. El juez ha dictado el ingreso en prisión de los arrestados. La investigación se inició en diciembre del pasado año tras un robo con violencia en un domicilio de Bétera ( Valencia ), mientras los moradores se encontraban en el interior. Los asaltantes actuaron con gran brutalidad, golpeando, amenazando y amordazando a las víctimas. Como consecuencia de estos hechos, una de ellas falleció a los pocos días debido a las lesiones sufridas y a su delicado estado de salud. Los agentes centraron la investigación sobre un grupo criminal con un perfil muy agresivo , lo que permitió identificar a los presuntos autores y ubicarlos en sus respectivos lugares de residencia. A partir de ahí, realizaron continuos controles de actividad operativa sobre los mismos para obtener nuevos indicios relativos a la comisión del robo con violencia que dio origen a la pesquisas. Se está investigando si este grupo criminal podría estar relacionado con otros hechos de similares características en otros países, ya que gran parte de los asaltos han sido sobre domicilios y comercios regentados por ciudadanos chinos . Los investigadores descubrieron que algunos de los detenidos podían estar vinculados con ataques muy similares en Venezuela y República Dominicana. En el marco de esta operación , el pasado mes de junio los agentes detuvieron a las seis personas, todas ellas de nacionalidad venezolana. En los registros efectuados se han intervenido armas de fuego real, así como herramientas e instrumentos especializados con una clara finalidad delictiva. También se recuperaron numerosas joyas pertenecientes a las víctimas, que fueron sustraídas en distintos asaltos. La investigación, dirigida por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 5 de Llíria (Valencia), ha decretado prisión incondicional para todos los detenidos. Fue iniciada por el Equipo Territorial de Policía Judicial de Llíria y llevada a cabo de manera conjunta con la Sección de Atracos y Delitos Violentos de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil y la Unidad Orgánica de Policía Judicial de Madrid.