Aproximadamente 500 mil toneladas de acero exportado anualmente desde México a Estados Unidos podrían verse afectadas por una nueva medida anunciada por el Gobierno de Joe Biden al pagar aranceles de 25 por ciento bajo la Sección 232.
Esta decisión busca cerrar lo que la administración de Biden considera una ‘laguna’ en sus políticas comerciales que ha permitido el ingreso de acero y aluminio chinos a su mercado a través de México, evadiendo aranceles y perjudicando a la industria siderúrgica estadounidense.
La nueva política establece que solo el acero fundido y vertido en México, Estados Unidos o Canadá podrá ingresar libre de aranceles al mercado estadounidense.
Según fuentes de alto nivel de la administración de Joe Biden, actualmente, alrededor de 13 por ciento del acero que llega de México (equivalente a 500 mil toneladas) no cumple con este requisito.
Los funcionarios destacaron que las exportaciones de acero de China han aumentado 2 mil por ciento desde 2003, alcanzando 70 mil millones de dólares en 2023. Ante la desaceleración de su sector inmobiliario, China estaría buscando colocar su exceso de producción en mercados extranjeros, incluyendo el estadounidense a través de terceros países.
“China representa más de 50 por ciento de la producción mundial de acero y está produciendo más de lo que puede absorber, subsidiando exportaciones a precios artificialmente bajos”, explicó un alto funcionario en condición de anonimato. “Esto socava nuestras inversiones y perjudica a trabajadores en estados como Pennsylvania y Ohio”.
Ahora, los importadores deberán proporcionar a la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de EU (CBP, por sus siglas en inglés) la información necesaria para identificar los países donde el acero utilizado en la fabricación de estos artículos fue fundido y vertido.
Aunque los volúmenes son significativamente menores (alrededor de 105 mil toneladas métricas importadas de México en 2023), se aplicarán medidas similares, lo cual podría significar aranceles a 6 mil 300 toneladas.
Las importaciones de aluminio de México que contengan aluminio primario fundido o moldeado en China, Bielorrusia, Irán o Rusia enfrentarán un arancel del 10 por ciento bajo la Sección 232.
Además, los funcionarios estadounidenses señalaron que continuarán las conversaciones con México sobre aumentos en las importaciones de otros productos como varillas de refuerzo y conductos, que siguen siendo motivo de preocupación para la industria nacional.